Aunque la forma más común de escuchar música en la actualidad es mediante streaming, con Spotify, Apple Music, YouTube Music o Tidal a la cabeza, hay otras opciones de hacerlo. ¿Te acuerdas de los reproductores de música?
Muchos usuarios aún se resisten y prefieren mantener sus librerías tagueadas, ordenadas en un disco duro o revisando sus cintas y CD’s con la comodidad e inmediatez que ofrece el soporte físico.
La cronología histórica de la música es caprichosa. Mientras desaparece el CD, el casete y el vinilo viven un renacimiento constante. Así que no seremos nosotros quienes daremos por muerto a nuestro querido Winamp. Aunque aquí te traemos ocho magníficas alternativas, vestidas para el siglo XXI.
ITUNES
Sí, sabemos que tiene sus enemigos, pero a veces las mejores opciones son las más ignoradas. Si tu interfaz de trabajo es Mac, la respuesta es evidente: está preinstalada en macOS Mojave. Además, iTunes aporta total integración con Siri, extensiones con el OS y total conexión con Apple Music, el servicio de streaming. También cuenta con reproductores visuales, integración con podcasting y herramientas para vender tu propia música.
Si no eres ‘maquero’, todavía hay una respuesta justificativa: es el único software nativo para manejar un iPod, es perfecto para taguear e incluso poner carátulas a los archivos y es capaz de gestionar una biblioteca enorme; una sobre la que podemos crear playlists personalizadas o buscar la sorpresa mediante Genius, una especie de IA que agrupa canciones por estilos.
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VLC MEDIA PLAYER
Seguro que la conoces, el icónico cono naranja de tráfico, disponible en Android, macOS, Windows 10 o Linux. Que sea considerada una de las apps de cabecera de vídeo no significa que no sea una versátil herramienta para audio.
Cuenta, de hecho, con un ecualizador de ocho bandas y un par de añadidos interesantes, como funciones para escuchar radio online. Es muy intuitiva incluso para crear playlists. Y nunca vas a tener que descargar un códec extra, porque VLC lee casi cualquier formato que le eches.
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MUSICBEE
Si lo que necesitas es escuchar música en algún reproductor sencillo y ligero, MusicBee es un acierto total. Es muy simple y también permite lo que sus rivales. Es decir, organizar, editar etiquetas ID3, sincronizar con carpetas, compatibilidad con formatos de audio sin pérdidas o de alta calidad como FLAC, WAV o Aiff y, para melómanos, también hay un pequeño apartado para ecualizar pistas.
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AIMP
Pongámonos serios. Porque AIMP es quizá la mejor alternativa que un usuario de Windows 10 puede tener. ¿Por qué decimos esto? Porque cuenta con temporizador de sueño por pista, para usar de despertador. Porque es compatible con estos formatos: MP3 MP3 HD, WAV, APE, MPGA, OGG, UMX, MOD, MO3, IT, S3M, MTM, XM, AAC, FLAC, M4A, M4B, MPC, WV, OPUS, DSF, DFF y TTA. Porque también se puede sincronizar con Android.
Y porque utiliza un algoritmo que consigue el sonido más cristalino posible para cada pista. Esta es la faceta más alquímica del programa. Pero siempre podemos ajustarlo a nuestro gusto: incorpora un ecualizador de 18 bandas —la versión para Android cuenta con ecualizador de 10 bandas— con preconfiguraciones por estilos. También podemos convertir formatos y editar etiquetas sin necesidad de añadidos o software externo. Una suite completa.
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CLEMENTINE PLAYER
La alternativa para quienes viven entre Linux y Windows. Si sueles usar alguna distri GNU/Linux, Clementine es perfecto para ti. Aunque también existen versiones compatibles para el resto de sistemas operativos. Su mayor virtud reside en la sincronización. Con ella podemos reproducir la música que tengamos en servicios en la nube como Dropbox o Google Drive. Todo lo almacenado pasará a ser parte de nuestra librería digital.
Descarga | Clementine Player
PLEX
Plex es el eterno ignorado. Y hasta que no le sacas todo el jugo, no desvelas su potencial. Con Plex puedes sincronizar todo lo que tengas en tu NAS y reproducirlo desde cualquier dispositivo vinculado a la misma red wifi. Bueno, incluso puedes hacerlo de forma remota. Además, no es para nada restrictivo: es un servicio gratuito y está disponible en web, en macOS, en cualquier versión de Windows, en Android, iOS, consolas con Xbox o PS4, etcétera. Su motor lee y taguea toda nuestra música. ¿Hace falta algo más?
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PULSAR MUSIC PLAYER
Dedicamos un pequeño apunte a los usuarios de Android. Ya que este reproductor basado en Material Design solo está disponible en el sistema operativo de Android, aunque ofrece soporte para Chromecast y Android Auto, además de sincronizarse con Facebook y Last.fm.
Es una app muy completa y admite casi cualquier tipo de archivo, desde MP3, AAC, FLAC, OGG a otros más pesados y sin compresión como WAV o AIFF. Descarga portadas e info de cada artista como iTunes y, sus versiones de pago Pulsar+ y Omnia, añaden un ecualizador de cinco bandas con distintos realces y personalizaciones idóneas para melómanos.
Descarga | Pulsar Music Player
VOX
Esta app no tiene ningún tipo de afiliación política, ni relación, pero es la mejor si utilizas macOS como sistema operativo. Es una aplicación muy similar a AIMP, con algoritmos para mejorar la calidad de sonido resultante. Presumen de optimizar el audio MP3 hacia un resultado de escena más amplia, similar al FLAC.
Además incorpora mejoras como BS2B, un recurso para evitar la fatiga sonora del estéreo —cuando usamos auriculares—. Es compatible con los altavoces inteligentes Sonos y webs profesionales como HD Tracks, con el servicio de almacenamiento ‘ilimitado’ VOX Music Cloud y con formatos como FLAC, MP3, CUE, APE y M4A, dedicando especial esmero a reproducir audio en calidad 24 bits / 192 kHz o archivos codificados en multicanal (5.1, por ejemplo).
Descarga | VOX
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Imágenes | Cabecera de Unsplash (Alice Moore), sus respectivas webs