La crisis sanitaria de la covid-19 que vivimos no es la primera ni será la última a la que se enfrente la humanidad. ¿Pero y si la próxima pandemia llegara del espacio? Tranquilos, la comunidad científica cuenta con protocolos de seguridad para frenar a posibles patógenos llegados de Marte.
Un informe elaborado por científicos de las Academias de Ciencias, Ingeniería y Medicina de EE.UU. revisa los hallazgos y recomendaciones recientes relacionados con la «cuarentena planetaria»: la protección de la Tierra y otros mundos de la contaminación cruzada.
Se trata de garantizar que los viajeros espaciales no contaminen otros planetas y, al mismo tiempo, que no traigan contaminantes extraterrestres a la Tierra, que bastante tenemos con contener a nuestros propios patógenos.
Retorno de muestras de marte
El objetivo más inmediato de exploración extraterrestre es Marte. Hasta ahora, la NASA ha enviado distintas misiones a ese planeta, con rovers equipados con instrumentos para analizar el suelo, el clima, la atmósfera del planeta, etc. Los rovers han obtenido datos e imágenes que han ayudado a descubrir algunos secretos del Planeta rojo. Traer muestras a la Tierra para su posterior análisis es “el siguiente paso lógico en la exploración robótica de Marte”, dijo la Agencia Espacial Europea (ESA) en su sitio web.
De hecho, la ESA y la NASA estudian en este momento diversas posibilidades para lanzar una campaña internacional de retorno de muestras de Marte a la Tierra antes del 2030, aunque ya veremos cómo afecta la actual crisis sanitaria a este calendario. Según explican, serán necesarias tres misiones para llegar al Planeta rojo y, una vez allí, recolectar y almacenar las muestras que se traerán a nuestro planeta para ser analizadas con equipos más sofisticados. Este verano, está previsto el lanzamiento el rover “Perseverance” que buscará signos de vida y recolectará muestras de roca y tierra para un posible regreso a la Tierra.
Zonas de exploración marciana
La previsible proliferación futura de misiones espaciales a Marte, tanto públicas como privadas, en todo el mundo hace que el profesor Scott Hubbard, coautor del informe y profesor adjunto de aeronáutica y astronáutica de la Universidad Stanford, plantee en una entrevista con Stanford News la necesidad de definir una “zona de exploración” marciana donde los humanos puedan aterrizar y la contaminación, en caso de producirse, se pudiera controlar.
Se debe tener en cuenta que dicha contaminación, en caso de tener lugar, no solo viajaría en dirección de Marte a la Tierra, sino también en sentido contrario. “Los trajes espaciales puede gotear o incluso explotar, liberando todo tipo de microbios terrenales y contaminando la superficie para futuras misiones científicas”.
Muestras de marte como el virus del ébola
Eso sí, no alimentemos el pánico que no estamos para sustos, según explica el científico de Standford, la posibilidad de que rocas de Marte que tienen millones de años contengan una forma de vida activa que pudiera infectar la Tierra es “extremadamente baja”. A pesar de ello, las muestras marcianas que se obtengan en la misión Mars Sample Return serán puestas en cuarentena y tratadas como si fueran el virus del Ébola hasta que se confirme su seguridad.
En cuanto a los astronautas, a su regreso serán puestos en cuarentena como se hizo con los tripulantes de la misión Apolo hasta que se descubrió que la Luna no representaba riesgo de contaminación.
Detrás de este informe, se vislumbra la intención de la comunidad científica de tranquilizar a la población, aterrada por la pandemia causada por la covid-19, ante la posibilidad de que las misiones espaciales pudieran importar un patógeno marciano. “Recomendamos a la NASA que sea muy proactiva para educar al público e informar sobre las medidas extraordinarias previstas para garantizar la seguridad de las muestras que se traigan del espacio”.
De esta forma, se trata de salir al paso de un hipotético rechazo social a este tipo de misiones, tras el trauma causado por la covid-19.