Los dispositivos digitales se han convertido en una herramienta indispensable en el proceso educativo de los niños con síndrome de Down, ya que minimizan las dificultades de los métodos tradicionales de aprendizaje y favorecen la integración de los alumnos con estas discapacidad.
Gracias a su funcionamiento intuitivo y visual, los dispositivos digitales se han convertido en una instrumento esencial para el aprendizaje de los niños con Síndrome de Down. Su fácil manejo favorecen su aprendizaje, minimizando exponencialmente las dificultades que los métodos tradicionales suponen para la integración de los alumnos con síndrome de Down, y posibilitan un salto cualitativo en la integración del alumnado con esta discapacidad intelectual. Asimismo, implican a la familia en la formación de sus hijos, favoreciendo la coordinación de esta con la escuela.
El proyecto H@z TIC, de la fundación Down España, afirma que las nuevas tecnologías consiguen mejoras en la capacidad semántica y de la memoria, corrigiendo trastornos del habla, aumentado su capacidad de atención y de concentración, reforzando la visión y audición o fomentando el pensamiento lógico y matemático.
Atender a las necesides de los niños con síndrome de down
Para que este proceso resulte más ameno y sencillo es necesario la implementación de aplicaciones que se adecuen a sus necesidades cognitivas. Entre ellas cabe destacar:
- Palabras esenciales: a través de esta aplicación el niño podrá reconocer palabras, utilizando imágenes y sonidos, y reforzar su memoria con juegos de realizar parejas u ordenar elementos.
- Números especiales: contiene un conjunto de actividades para ayudar a desarrollar las habilidades tempranas referentes a números, incluyendo el conteo, la comparación, la ordenación y la comparación-selección.
- Memory Fun: se basa en el reconocimiento de imágenes y asociación. Recomendada para edades tempranas.
- Paint Gallery: gracias a esta app podrán dar sus primeros pasos en el mundo de la escritura y empezar a expresarse con colores, dibujos y formas.
En definitiva, la aplicación de las nuevas tecnologías a la educación de las personas con Síndrome de Down, acompañada de una metodología adecuada y de las permitentes adaptaciones, es más efectiva que la metodología tradicional. Su empleo puede crear nuevas y prometedoras alternativas de enseñanza, ya que tienen la capacidad de adecuarse a las necesidades personales de cada niño, favoreciendo la inclusión de este alumnado en el ámbito escolar y su desarrollo a nivel educativo, personal y social.