Con el objetivo de disminuir las acciones de violencia de género en línea en África, se ha creado Digital Safe-Tea, un juego que intenta explicar a los más jóvenes cuáles son los riegos a los que se enfrentan cuando acceden al mundo digital.
Aisha, una joven africana que trabaja como responsable de comunicación en una ONG regional, recibe una notificación en la que se le informa de que alguien está intentado iniciar sesión en sus redes sociales. Frente a esta situación, Aisha decide cambiar todas las contraseñas de sus perfiles.
Aunque más de un usuario de las redes sociales se haya visto en esta situación, este personaje y su historia es una creación de Digital Safe-Tea. Se trata de un juego interactivo que intenta promover la seguridad digital en África, creada por Pollicy, una organización ugandesa que trabaja en la gestión de datos y la tecnología cívica para el desarrollo, y que cuenta con la colaboración de Paradigm Initiative, una asociación de referencia en la defensa de los derechos digitales.
Ambas asociaciones tienen como objetivo acercarse, a través de este juego interactivo, a los usuarios más jóvenes de las redes sociales y crear conciencia sobre las amenazas que a las que se pueden enfrentar en estas plataformas e informarles sobre las precauciones que deben tomar para evadirse de ellas. Esta herramienta interactiva hace especial hincapié en los peligros a los que se enfrentan las mujeres en la red, pero es útil para todos los jóvenes, al margen del género.
Cómo actuarías en mi situación
Digital Safe-Tea se basa en la historia de tres personajes: Aisha, Goitse y Dami, que representan diferentes arqueotipos de mujeres africanas.
Al comenzar el juego, el usuario debe de elegir a una de las protagonistas y enfrentarse a amenazas digitales como la suplantación de identidad, el acoso por redes y el intercambio no consensuado de imágenes íntimas.
A medida que avanza el juego, los jugadores deben de decidir cómo responder a dicha amenaza eligiendo entre todas las opciones disponibles, pasando así a la siguiente etapa del juego. A lo largo de todo este proceso, al usuario se le van presentando lecciones sobre cómo se debe enfrentar a este tipo de amenazas en la vida real. Asimismo, son dirigidos a sitios y kits de herramientas donde pueden obtener más información sobre el tema que deseen.
la violencia de género: una lacra para las mujeres africanas
Durante la última década, la accesibilidad a Internet y a las plataformas digitales se ha visto como una gran oportunidad para paliar la brecha de género en África. Entre los muchos beneficios de la digitalización, las herramientas digitales han brindado una oportunidad fundamental para que las mujeres puedan participar en discursos que anteriormente eran inaccesibles para ellas y defender así sus necesidades.
Sin embargo, los espacios en línea, a menudo, albergan y perpetúan amenazas o actos de violencia de género. El informe titulado Realidades alternativas, Internet alternativa. La investigación feminista africana para un Internet feminista, revela que una de cada tres de las mujeres africanas que han sido entrevistadas han experimentado alguna forma de violencia de género a través de las plataformas digitales y que estos incidentes se manifestaron como acoso sexual (36%) o como proposiciones sexuales no deseadas, como insultos ( 33,2%) y hostigamiento (26.7%).
Estos actos tienen como consecuencia que la mayoría de las usuarias que han experimentado violencia de género en línea modifiquen la manera en la que usan las plataformas digitales o, incluso, dejen de utilizarlas. El 66% de las mujeres entrevistadas reconocieron haber bloqueado a los autores que han ejercido alguna forma de violencia; pero el 14,5% confesó haber borrado o desactivado alguna de sus cuentas y el 12,2%, haber dejado de usar algún servicio digital después de experiencias de violencia.
El informe recuerda que la brecha digital de género no deja de aumentar en los países africanos. La diferencia del 12% entre hombres y mujeres que usan Internet en todo el mundo, aumenta hasta el 32,9% en los países del sur global.
En definitiva, para contribuir a que la brecha digital femenina y la violencia de género disminuyan en estos países, es necesario que las mujeres puedan contar con herramientas, como Digital Safe-Tea, que las permita obtener información y adquirir habilidades para saber actuar frente a estas acciones.