Los hermanos Luis y Santiago Auserón han elaborado un duro informe sobre la distribución de la música digital en el que analizan el impacto de las nuevas tecnologías en el sector musical.
Según los fundadores de Radio Futura, el modelo actual de reparto de ingresos beneficia a las grandes compañías y perjudica a los creadores independientes. Así «se produce una situación paradójica que destruye la motivación para la dedicación artística y favorece la concentración pasiva de las obras musicales».
Precisamente, este informe, que se puede leer íntegro en EFE EME, coincide con la despedida de la música de Rayden que, en declaraciones a la cadena SER, afirmaba estar «cansado de que la música se dé por hecha», haciendo referencia al poco valor que se da a lo que ya apenas tiene precio.
Explican los músicos que las plataformas digitales como Spotify o Apple Music pagan a las discográficas una cantidad fija por cada reproducción de una canción, independientemente de la popularidad o el género del artista. Estas discográficas, a su vez, reparten ese dinero entre sus artistas según sus contratos, que suelen ser muy desfavorables para los músicos.
reparto proporcional de ingresos
«Las regalías que comportan los servidores digitales a los artistas son muy pequeñas», detallan. Sin embargo, los ingresos que genera la cesión de un catálogo voluminoso a las tres grandes compañías: Sony, Warner y Universal, «suponen un capital muy significativo mientras que lo que llega a cada artista es insignificante», aseguran.
Los hermanos Auserón afirman que este sistema genera una gran desigualdad entre los artistas más famosos y los más minoritarios, ya que estos últimos reciben una parte ínfima de lo que generan sus obras. Además, critican que las plataformas digitales no ofrecen información transparente sobre el número real de reproducciones o el criterio para elaborar sus listas de éxitos.
Los músicos proponen una alternativa basada en el principio de «reparto proporcional», es decir, que cada artista reciba un porcentaje del dinero generado por sus canciones en función del número de oyentes que las escuchan. De esta forma, se evitaría la concentración de ingresos en unos pocos artistas y se favorecería la diversidad cultural.
Los auserón piden la movilización de artistas y consumidores
Los hermanos Auserón concluyen su artículo haciendo un llamamiento a la movilización de los artistas y los consumidores para exigir un cambio en el modelo de negocio de la música digital. Asimismo, reclaman una mayor intervención pública para regular este sector y garantizar los derechos de autor y la remuneración justa de los creadores.
Por último, recuerdan que existe un debate internacional sobre los procedimientos de retribución de la música digital y que existen iniciativas legislativas que defienden los intereses de los artistas y consumidores.
«En España no tenemos sindicatos de músicos y las sociedades de gestión no se pronuncian acerca de estos hechos. Nos aboca a la vía judicial para defender nuestros derechos», finalizan los hermanos Auserón.