Los drones se han convertido, por méritos propios, en los gadgets de moda del momento. Algunas marcas han sacado dispositivos que podemos controlar gracias a nuestros smartphones y tablets, los cuales nos proporcionan un entretenimiento. No es algo nuevo, seguro que más de uno ha tenido alguna vez un aparato de aeromodelismo en sus años mozos, solo que ahora llegan con una renovada fuerza.
En parte, esa renovación llega gracias a las nuevas tecnologías, ya que suelen incluir cámaras que transmiten vía WiFi a nuestros dispositivos y podemos ver lo que ellos ven en todo momento. Para todos aquellos de vosotros que no conocíais muy bien de que iba esto de los drones, estoy seguro que empezáis a verle la utilidad y la «diversión». Pero vamos a empezar por el principio.
La normativa: ¿qué es dron y qué no es dron?
Dada la rápida popularidad que están teniendo este tipo de gadgets, la noticia ha saltado en todos los lados. Seguro que has visto o has leído (o te han dicho) en más de una ocasión que los drones están prohibidos en España (los voladores). Entonces… ¿Porqué los venden? Porque estamos utilizando mal el término dron.
Según AESA (Agencia Estatal de Seguridad Aérea), un dron es todo aquel dispositivo volador que es usado con fines comerciales y/o profesionales. El Parrot Beboop que puedes adquirir en cualquier superficie comercial no es un dron, a no ser que lo utilices para grabar vídeos y comercializarlos o lo utilices para ayudarte en alguna tarea profesional, en ese caso SÍ es un dron. Solo en estos casos es cuando deberás disponer de un permiso especial para poder utilizarlos.
En el resto de las ocasiones (el que nos interesa mayormente a todos, vamos), cuando vamos a utilizar el dron (que nosotros lo definimos así, aunque no lo sea) para nuestro disfrute personal, nos debemos regir por la legislación ya existente. Cualquier aparato volador por radiocontrol únicamente podrá ser utilizado con fines lúdicos en espacios no urbanos y sin habitar. Las sanciones que podríamos sufrir de no cumplir esta legislación (y sobre todo si tenemos algún tipo de accidente con heridos) son lo suficientemente importantes como para ser tenidas en cuenta.
Ahora que ya tenemos una idea grosso modo de lo que podemos hacer y no podemos, vamos a ver los drones más famosos ahora mismo. Aún así, desde Anexo M os recomendamos que, si vais a utilizar algún dron volador, os informéis antes en vuestro ayuntamiento de posibles leyes que se hayan podido aplicar aparte de las de AESA. Hay algunas comunidades autónomas y ayuntamientos que están legislando sobre este tema.
Los mejores drones disponibles ahora mismo en el mercado
Como suele ocurrir en estos casos, tenemos a grandes rasgos dos tipos de drones. Por un lado, los profesionales, dedicados a usos comerciales y para el profesional, en este caso estaríamos hablando de «drones»propiamente dichos y por ello se rigen a una legislación especial. Por otro, tenemos los drones de «consumo» que son más modestos, pero seguro que te harán pasar un buen rato (se trata de divertirse ¿no?). En un principio nos centraremos más en estos últimos, aunque también veremos alguna opción de las versiones más enfocadas a usos comerciales.
- Parrot BeBop Drone: La sensación de el pasado año 2014, como característica «novedosa» tenemos la amplia cobertura de su antena WiFi por lo que podemos hacer con él vuelos de hasta 2 kilometros de distancia. Tiene una batería corta (tan solo unos 12 minutos aproximadamente) y una cámara de 14 megapíxeles que si utilizamos la realidad virtual gracias a Oculus nos da una experiencia sobresaliente, casi cercana a volar. [Enlace]
- Hubsan X4 H107L: Tal vez la mejor opción si estamos empezando. Con cuatro hélices y posibilidad de girar en 6 ejes espaciales. Posee también una cámara de alta definición que nos permitirá ver lo que ve nuestro dron. Su batería tiene una duración aproximada de 7 minutos, aunque en tan solo una hora la tendremos completamente recargada si la enchufamos a cualquier salida USB de nuestro ordenador. [Enlace]
- Estes 004606W – Proto-X Dron: Este dron destaca por su reducido tamaño, estamos hablando de menos de 5 centímetros de lado. Tiene una serie de Leds que nos permitirán identificar su parte delantera y trasera, así que podremos verlo mejor en condiciones de baja visibilidad. Al igual que el modelo comentado anteriormente, tiene una autonomía de 7 minutos y podremos recargarlo gracias a un puerto USB. [Enlace]
- Jumping Sumo de Parrot: Me encanta este dron ya que aunque no pueda volar es el todo-terreno perfecto. Corre, salta, se sube por las paredes, gira, bailotea y tiene una cámara con buena calidad de imagen. Resulta muy entretenido y como ocurre con las opciones de Parrot, nos permite manejarlo desde una aplicación específica de Smartphone. [Enlace]
- Phantom 2 Vision +: Esta es la solución profesional más potente que tal vez exista ahora mismo en el mercado, su precio de 950 euros nos indica que no estamos ante un juguete. Su autonomía es de 25 minutos de vuelo y su cámara es capaz de grabar en alta definición a 720 o 1080p. Su propia aplicación para móvil nos permitirá volarlo de manera sencilla y el adaptarnos a su manejo es cuestión de poco tiempo. [Enlace]
Las opciones son muchas y muy variadas, pero con esta selección seguro que podremos «matar» el gusanillo y ver hasta donde queremos llegar en este apasionante mundo. Pero desde Anexo M os aseguramos que una vez que entréis no querréis volver a salir de él.