La revolución de la tecnología es imparable, los tiempos han cambiado y los Reyes Magos han repartido casi tantos drones como bicicletas o monopatines. Estos pequeños artefactos voladores se pueden manejar a más de 100 metros de distancia y aunque la diversión esté asegurada, no son juguetes. Si encontraste un dron junto a tus zapatos, debes tener en cuenta toda la información que el Ministerio de Fomento ha recopilado en su página web para garantizar la seguridad y la utilización de las pequeñas aeronaves por parte de sus usuarios en el marco de la legalidad.
El sector de las aeronaves pilotadas por control remoto no para de crecer y ha surgido la necesidad de establecer una normativa temporal. La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) se encarga de la regulación de operaciones con drones de hasta 150 kilos y, según la legislación española, actualmente no se pueden sobrevolar espacios urbanos y tan solo se permite elevar los drones hasta unos 120 metros. De este modo, se evita que entren dentro del espacio aéreo para naves tripuladas.
tipos de drones
Según diferencia la AESA, el dron es estrictamente el vehículo no tripulado que se destina a tareas comerciales o profesionales. En el resto de casos nuestro vehículo es legalmente una aeronave destinada a uso de ocio o recreativo y, por tanto, la actividad queda regulada por la Real Federación Aeronáutica de España y en su caso, por las indicaciones específicas que determina cada Comunidad Autónoma o municipio.
¿quién puede utilizar un dron?
A pesar de que no es necesario ser piloto, la AESA considera fundamental tener una formación teórica para dirigir un dron. Las aeronaves destinadas a un uso recreativo pueden utilizarse por mayores de 14 años, siempre dentro de un ámbito personal y privado. Sin embargo, para lucrarse con las imágenes captadas por el aparato, es necesario ser mayor de edad y acreditar un certificado de piloto de dron, superar una revisión médica específica y realizar un curso relacionado.
¿Dónde y cómo utilizo mi nuevo dron?
Si quiero utilizar mi nuevo dron en un espacio interior, hay que tener en cuenta que sea completamente cubierto, incluyendo techo. Además, debemos contar con el permiso de los titulares de esos recintos o si vamos a volar la aeronave en casa, no olvidar las recomendaciones de seguridad.
En caso de querer utilizar el dron en el exterior, la AESA establece una serie de normas. No podemos olvidar que siempre debemos tener nuestra aeronave a la vista; atender a las condiciones meteorológicas; no está permitido superar los 120 metros de altura; poner en riesgo a otras personas; debemos utilizar el dron en zonas adecuadas para el vuelo como zonas despobladas; y sobre todo hay que tener en cuenta que está prohibido sobrevolar drones en zonas urbanas como parques, plazas o playas.
Por todo ello, desde la AESA insisten en que »el dron no es un juguete, es una aeronave» e informan de que las multas por su uso indebido pueden alcanzar los 225.000 euros.
EL ORIGEN DEL DRON
Su nombre original es ‘vehículo aéreo no tripulado’ (VANT) y su origen está relacionado con los conflictos bélicos y los ejércitos. El más antiguo fue desarrollado después de la Primera Guerra Mundial, y ya durante la Segunda Guerra Mundial se usaron para entrenar a los operarios de los cañones antiaéreos. Sin embargo, hasta finales del siglo XX los drones no empezaron a operar mediante radio control con todas las características de autonomía. Desde entonces, han evolucionado sus aplicaciones militares y, al igual que ha ocurrido con otras muchas tecnologías, las empresas vieron una gran oportunidad en este gadget, que a día de hoy garantiza la diversión para adultos y niños.
el lado más divertido
A pesar de las advertencias que debemos tener en cuenta antes de utilizar estos aparatos voladores, no podemos negar que los drones molan y sus capacidades no dejan de sorprendernos. Tal como recogió la revista digital Pop de Orange en su último número dedicado a los drones, Intel batió un récord Guinness al sincronizar 100 drones, que ofrecieron un maravilloso espectáculo de luces al ritmo de una orquesta que interpretó la Quinta Sinfonía, de Beethoven. Asimismo, los drones han irrumpido en otras artes como en el cine y la fotografía. De hecho, las películas grabadas con drones ya cuentan con su propio festival. ¡La tecnología es alucinante!
Fuente: ‘Un dron no es un juguete, es una aeronave’, Ministerio de Fomento.
Fotografías: Pixabay y Amedeebulle.
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