Laurent Paillassot, CEO de Orange, y José María Álvarez-Pallete; Presidente de Telefónica
Orange y Telefónica han alcanzado un nuevo acuerdo comercial de acceso mayorista a la red de fibra óptica de Telefónica, este acuerdo es una extensión del que ya tienen suscrito desde 2016, por el que Orange podía seguir accediendo a las conexiones en las que Telefónica no tiene obligaciones regulatorias de prestar un servicio de acceso indirecto a su fibra óptica. Desde Orange señalan que los planes de inversión en fibra de la compañía permanecen inalterados con este acuerdo, «que nos da capacidad de optimizar nuestro despliegue». Orange invirtió en España un total de 1.115 millones de euros en 2017 -lo que representa un 21% sobre sus ingresos anuales de 5.371 millones de euros-, destinados fundamentalmente, al desarrollo de las nuevas redes de alta velocidad 4G y de fibra óptica.
Con este acuerdo, Orange y Telefónica refuerzan su compromiso mutuo de mantener una relación mayorista intensa a largo plazo en las zonas donde Orange no tiene planificado desplegar su propia fibra. Orange garantiza unos ingresos mayoristas en toda la huella de Telefónica (tanto la zona regulada como no regulada) durante los próximos años a cambio de unos precios competitivos en la zona sin obligaciones.
«Como siempre -añaden desde Orange – esta alianza mantiene nuestro acceso a toda la huella de Telefónica además de a los hogares de nuestro despliegue propio. Seguiremos desplegando intensamente aprovechando, además, las sinergias que nos permitirá migrar a nuestros clientes a red propia».
beneficios para los clientes
A la pregunta sobre las razones de este acuerdo, las mismas fuentes señalan que «es para garantizar una estabilidad de los precios en las zonas sin obligaciones para cubrir los huecos de cobertura de nuestro despliegue en curso». De hecho, el acuerdo permite a Orange disponer de una alternativa a sus acuerdos de coinversión con otros operadores.
El acuerdo entre Orange y Telefónica, basado en compromisos de compra a largo plazo, pone en valor las sinergias que se generan al acceder Orange a la red de Telefónica, lo que incrementa su grado de utilización y, por tanto, la eficiencia del despliegue y la optimización de la inversión para ambas compañías.
La colaboración entre Orange y Telefónica redundará también en beneficio de los consumidores, que tendrán a su alcance una mejora de cobertura y de alternativas en redes de nueva generación en el ámbito nacional y, por consiguiente, una mayor y más rápida disponibilidad de los servicios asociados a la economía digital.
La red de fibra de Orange llega ya a 12 millones de hogares, lo que reafirma el incuestionable compromiso de Orange con el despliegue de fibra en España. Así, solo meses después de adelantar a 2018 su objetivo de cubrir 14 millones de inmuebles con tecnología FTTH, Orange aceleró su despliegue, ampliando hasta un total de 2.000 millones su inversión total en fibra en España, lo que le permitirá llegar con esta tecnología a 16 millones de hogares en 2020.
fibra a la española
Tal como señaló en Nobbot Manuel Sánchez Malagón, Director de Planificación de Red en Orange España, «España es el paradigma de país europeo con la mayor conectividad en fibra y el único que planea llegar casi al 100% de hogares en 2020 con esta tecnología. Esta situación de privilegio se debe, sobre todo, a los dos grandes operadores que ahora han firmado este acuerdo y que han decidido invertir masivamente en el desarrollo de la fibra óptica: Orange y Telefónica».
En la excelente situación de la fibra en España han tenido un papel fundamental los acuerdos de inversión conjunta entre operadores. «Esta es la forma más eficiente e inteligente de realizar los despliegues de fibra, pues reducen costes y tiempos hasta puesta en servicio», señala Sánchez Malagón. Orange ha sido el operador más activo para construir acuerdos con otros operadores, desde los comienzos en 2013 con Telefónica, en 2014 con Vodafone y los acuerdos con MásMóvil y Euskaltel en 2017.
Hoy, gracias a la actividad de los operadores y a su colaboración, España es el país europeo número uno en despliegue de fibra y se halla entre los cinco primeros del mundo.