Las gafas de realidad aumentada (RA) cada vez tienen más usos y aplicaciones. Hoy, con un accesorio de este tipo, un turista puede recrear la época del monumento que tiene a la vista. En los colegios, estas gafas pueden servir para que los alumnos visualicen los músculos, huesos y tendones del cuerpo humano, o para que pongan nombres a los accidentes geográficos del paisaje. En el comercio, ya hay tiendas de muebles, como la sueca Ikea, que las usan para visualizar cómo quedan sus productos en un entorno real. Por su parte, la firma japonesa Epson presentó hace unos meses unas gafas desde las que se podía pilotar un dron.
En el mundo de la salud, el caso más típico de aplicación de este dispositivo es el de la cirugía asistida en remoto. Sin embargo, hay muchos más. En los últimos meses, hay dentistas en España que están recurriendo a las gafas de realidad aumentada para rebajar la ansiedad y el estrés que origina en sus pacientes la idea de acudir a la consulta. Y es que sacarse una muela, hacerse una ortodoncia o implantarse una prótesis dental quita el sueño a muchos.
Para calmar a los pacientes y hacer su estancia más agradable, algunas clínicas dentales en España han optado por las gafas Icnos. Una de ellas es la Clínica Dental AGVP, de Madrid, que lleva el doctor Juan Delgado. Este centro, que cuenta con el certificado de calidad de la asociación Compromiso y Seguridad Dental, pone a disposición de sus pacientes un dispositivo que les distrae mientras el odontólogo hace una intervención, y que, a la vez, facilita la comunicación entre médico y paciente en los momentos más comprometidos.
Viendo Netflix mientras me sacan una muela
Como nos explica el propio Juan Delgado, gracias a estas gafas, sus pacientes pueden navegar por un menú que, entre otras cosas, permite ver una serie en Netflix, una película, leer un libro o echar un vistazo al periódico en internet durante el tiempo que pasan en la consulta. “Al final es como utilizar una tablet, pero viéndola a través de las gafas”, recalca el especialista.
Para hacer posible la comunicación médico-paciente, este tiene dentro de la gafa un botón con opciones prefijadas para comunicar. Si durante el tratamiento el paciente siente la necesidad de contar algo al odontólogo, como por ejemplo preguntar cuánto falta o decirle que necesita una pausa, lo puede hacer a través de la app, que está conectada a un altavoz Bluetooth que emite mensajes predefinidos. Todo ello sin interrumpir el trabajo del profesional.
El precio de cada gafa ronda los 2.000 euros, y ya han sido muchas las personas que las han probado y que, según Juan Delgado, han salido “encantadas”. “Hay un feedback muy bueno con los pacientes”, subraya el médico.
Otros hitos tecnológicos
No obstante, las gafas de realidad aumentada son el último hito tecnológico en un ámbito, como es el de la odontología, que lleva años transformándose. El doctor Delgado recuerda que la cirugía guiada por ordenador para reducir los tiempos quirúrgicos y la sedación consciente con la ayuda de un anestesista para aquellos pacientes que son muy aprensivos han sido avances relevantes.
Además, la toma de medidas de la boca y la dentadura con escáneres ha logrado evitar “las engorrosas pastas” que antes se utilizaban, y que además dejaban un muy mal sabor en la boca y producían angustia. Por otra parte, gracias a la toma de impresión digital y a las nuevas técnicas radiográficas, los odontólogos pueden realizar la planificación de los tratamientos de una manera mucho más precisa y predecible.
La domótica también ayuda
Hoy es posible realizar diseños de sonrisa por ordenador, lo que permite tener una aproximación del antes y del después del tratamiento. Además, gracias a la impresión 3D también se puede obtener una férula quirúrgica más fácilmente. Hasta la domótica está de parte de los odontólogos para rebajar la tensión y mejorar el servicio. En las clínicas dentales se van haciendo hueco los sistemas de luces que adecuan su intensidad a las necesidades del momento. Por ejemplo, para realizar un blanqueamiento dental el médico puede poner un ambiente boreal que relajará al paciente.
Delgado cree que el nivel de innovación tecnológica de los dentistas españoles es bueno y está a la altura de otros países. “En España tenemos la suerte de contar con odontólogos muy cualificados y muy bien preparados en relación a los últimos avances, y poco a poco, se van introduciendo todas las novedades tecnológicas en las consultas generales, con lo cual los odontólogos van aprendiendo a adaptarse a ello”, remata.
Imágenes | Compromiso y Seguridad Dental