En esta época, donde parece valer más una imagen que mil palabras, Ana Fernández Quirós, diseñadora gráfica por formación, vocación y convicción, ha visto cómo su sensibilidad y atención han sido atraídas hacia la fotografía artística. Esta polifacética creativa se declara discípula de la vieja escuela, de la fotografía analógica, del revelado y procesado en casa, del papel y el carrete, los contactos y el ampliado. Ana ha creado un largo portfolio de magníficas imágenes donde se observa su interés por el detalle, el día a día y la búsqueda de emociones. Las redes sociales no le preocupan, valora la calidad de las imágenes sobre la creación constante de las mismas. En Nobbot nos ha encantado su galería de fotografías y reflexionar con ella sobre cómo la tecnología influye en este arte fotográfico.
– Es apasionante cómo relacionas el ser humano con el lugar donde tomas la fotografía, siempre otorgando protagonismo a la persona sobre el paisaje, fundiéndolos para provocar una sensación. ¿Cómo consigues esa fusión? ¿Analizas la escena antes o es un momento fugaz?
Se dan los dos casos. Cuando veo un escenario en el que quiero resaltar arquitectura, espacios vacíos, sombras interesantes, etc… intento visualizar la foto con anterioridad para poder encuadrar desde el mejor ángulo. Pero es verdad, que la mayoría de las veces mis fotos en los últimos tiempos están basadas en momentos espontáneos, mi ojo está al acecho en cualquier situación cotidiana para sacar el móvil y capturar esa escena.
– ¿Tienes una práctica habitual para hacer fotografía? ¿La fotografía es tu hobby o tu profesión?
Mi práctica habitual es intentar ver los detalles de mi vida cotidiana de forma extraordinaria y poder descontextualizarlos para elevarlos a fotografía artística, es decir, pocas veces “salgo a hacer fotos”, la mayoría de ellas nacen de mí día a día. La fotografía actualmente para mí es un hobby, que me está dando muchas satisfacciones, no sé si en un futuro llegaría a dedicarme a ello.
– ¿Recuerdas cuando te dijiste por primera vez?: “Ay, me encanta la fotografía, quiero dedicarme a ello”.
Creo que mi pasión por la fotografía empezó cuando, en 4º de Bellas Artes tuve como profesor al gran Víctor Steinberg con quien no aprendí técnica, pero sí me transmitió mucho entusiasmo por esta disciplina artística.
– ¿Cómo crees que ha cambiado el mundo de la fotografía la llegada del digital y de los programas informáticos como Photoshop, que permiten retoques de todo tipo? ¿Cómo afecta al trabajo del fotógrafo? Como diseñadora gráfica ¿crees que retocar una fotografía hace que esta pierda valor?
Las herramientas, la técnica y el software de los que hoy disponemos son medios que nos facilitan la vida para poder expresarnos y conseguir aquellos acabados, o aquellas funciones que nos permiten pulir una obra. Depende de lo que estemos buscando perderá valor o no, y me explico: no es lo mismo una fotografía artística, social, documental, publicitaria, que una fotografía de calle. Hay categorías fotográficas en las que el retoque ensalza la obra final, otras en las que el retoque en vez de beneficiar lo que hace es restar espontaneidad. Como en todo, yo creo que no hay verdades absolutas. Actualmente estoy volcada en la fotografía de calle, en esta categoría creo que el retoque resta, no lo utilizo, a no ser valores como brillo, contraste, ruido o saturación … cada vez toco menos mis fotografías. Supongo que también es un tema de evolución.
– Empezaste por la fotografía analógica, pasando por las cámaras digitales y te sientes cómoda al fotografiar con el móvil. ¿Qué consecuencias tiene la evolución de la tecnología en tu manera de fotografiar? ¿Crees que el fotógrafo se hace por sus herramientas y el modo de utilizarlas?
La tecnología ha avanzado tanto que hoy cualquier dispositivo nos da la calidad suficiente para poder hacer “casi” cualquier tipo de fotografía. El móvil me permite llevarlo siempre encima y pasar más inadvertida que con la cámara, es menos intrusivo y obtengo de él la calidad que necesito para hacer fotografía de calle. La verdadera lente del fotógrafo está en su cabeza y su ojo, en ningún caso las herramientas hacen al fotógrafo, nitidez y resolución no significa calidad, calidad no significa técnica y mucho menos, tecnología.
Crear contenido de calidad para no empacharnos de imágenes
– En Instagram tienes dos perfiles diferentes, uno en blanco y negro y otro a color. ¿Cuál es la razón de este desdoblamiento? ¿Es alguna estrategia para ganar seguidores?
Cuando entro en una galería de Instagram me gusta que sea coherente, que tenga armonía y orden visual, aunque soy la misma en ambos perfiles cada uno tiene su espacio y mezclarlos solo podía llevar al caos visual del que huyo. Empecé mostrando mis fotografías en blanco y negro en @aquiros_photo hace dos años; son fotos más poéticas, basadas en la riqueza y la técnica del bw, donde busco emociones. Hace aproximadamente un año decidí abrir un perfil en color para que no se mezclaran con mis fotos en blanco y negro y poder mostrar otro lado de mi fotografía. En ambos perfiles soy la misma y de hecho aparece mi nombre en ambos, en @mifarfaya experimento más, utilizo el color solo cuando suma; busco sorpresa, diferencia, armonía y evolución.
– En la época de la inmediatez y las redes sociales. ¿Qué crees que es más importante, la generación constante de contenido o crear contenido de calidad?
Sin duda lo más importante es generar contenido de calidad. Hoy en día somos fruto de impactos visuales constantes, el empacho de imágenes es desmedido, vamos tan rápido que solo vamos a lograr pararnos ante una foto en las redes sociales por su calidad, siendo esta de la categoría que sea, no hablo solo de calidad artística.
– La visibilidad de las redes sociales ha provocado dolores de cabeza a muchos fotógrafos, haciéndoles sentir dependientes de sus visitas o me gusta ¿Alguna vez has sentido que en ti primara la atención de los espectadores antes que tu forma de fotografiar?
Cuando llegas de nuevas a las redes sociales, como en mi caso de forma tardía, te dejas impactar por los números, hasta que realmente entiendes cómo funciona todo internamente. Actualmente las galerías que más me gustan puedo asegurar que tienen muy poquitos seguidores, creo que con ello te lo digo todo. Los números en redes sociales, son eso, solo números, generados por factores que nada tienen que ver con la calidad del fotógrafo y de su obra.
– A veces, un golpe de suerte y cierta desorientación son cruciales para el éxito creativo. ¿Suele pasar que si eres demasiado consciente de lo que estás por hacer, no lo haces? ¿Cómo te relaciones con la inspiración?
No puedo dejar de citar a Pablo Picasso: “cuando llegue la inspiración, que me encuentre trabajando”. La inspiración es fruto del trabajo. En fotografía, haz fotos, haz muchas fotos, hay días buenos en los que te llevas varias “joyas” a casa, y hay días en los que tiras muchas fotos y no sale nada… Lo importante es no dejar de hacer fotos, seguir y seguir..
– Al hacer fotografía de calle has tenido que hacer fotos a miles de personas que estaban haciendo sus labores cotidianos. ¿Has tenido algún problema a la hora de hacer alguna foto a alguien?
Afortunadamente yo no he tenido ningún problema con nadie como muchos compañeros que se han encontrado situaciones complicadas, aunque sí que he tenido muchas malas miradas que valen más que palabras y que han hecho que dejara de hacer fotos. Empatizo y entiendo sobradamente el recelo de la persona que tengo delante, pero también voy con la tranquilidad de no estar haciendo nada malo, busco belleza y el lado artístico de la calle, no busco problemas, si a alguien no le gusta, se borra la foto delante de él y listo, no hay más.