Más de la mitad de los estudiantes universitarios de España son mujeres, según los datos de la OCDE. Sin embargo, si solo tenemos en cuenta las disciplinas agrupadas bajo el acrónimo STEM, las estudiantes representan solo un 30%, mientras que en ingeniería son el 23%.
La falta de referentes femeninos es uno de los grandes problemas con los que se encuentran las niñas a la hora de encaminar sus vidas profesionales. Aún existe ese rancio tópico de que ellos son más diestros en el mundo de las STEM y lo cierto es que la invisibilidad de muchas de las grandes científicas de la historia no ayuda a mejorar la situación.
Por ello, y con el objetivo de acabar con esa falta de modelos femeninos, el Museo de Ciencias Universidad de Navarra ha creado un proyecto de animación que presenta la biografía de distintas científicas tan relevantes como desconocidas para el público general. Con un tono divulgativo y a través de pequeños vídeos, el proyecto ha sido bautizado como “La mujer en la ciencia”.
Animación para situar a la mujer en la ciencia
En vídeos de apenas unos minutos y con una estética de cómic, se narra la historia de distintas mujeres que destacaron a lo largo de la historia por su trabajo en la ciencia y la tecnología. El autor de las ilustraciones y la animación de los vídeos es el profesor de Bioquímica Iñigo Izal Azcárate mientras que la periodista de Radio Universidad de Navarra Eva Lus se encarga de la narración en voz en off. Por su parte, el grupo Women for Science and Technology; así como de distintos expertos que colaboran en la elaboración de los guiones de las correspondientes biografías.
La celebración del Día de la Mujer fue el marco en el que se presentó el proyecto «La mujer en la ciencia». Desde entonces, se han creado distintos vídeos que presentan, entre otras, las figuras de la microbióloga Alice Catherine Evans (1881-1975), la enfermera y estadística Florence Nightingale (1820-1910), la bióloga y divulgadora Rachel Louise Carson (1907-1964) o la astrónoma Cecilia Payne-Gaposchkin (1900-1979).
Acabar con la brecha de género
Que la presencia femenina en el mundo de la ciencia y la tecnología no alcanza las cotas que debería es algo de lo que ya hemos hablado en más de una ocasión. Hay menos mujeres que hombres en las carreras científicas y técnicas y, en Europa, sólo el 30% de los empleos tecnológicos están ocupados por mujeres, un porcentaje que en España se reduce al 15,6%. Esta es solo una de las conclusiones más llamativas del Libro Blanco de las mujeres en el ámbito tecnológico, presentado por el Ministerio de Economía y Empresa.
Para luchar contra esta desigualdad nacen proyectos como La mujer en la ciencia o Yo quiero ser científica, una iniciativa impulsada por la Universidad Pública de Navarra (UPNA) que se toma muy en serio la divulgación de la vida y obra de científicas del pasado para despertar vocaciones científicas femeninas. También a través de divertidos vídeos publicados en el blog Traductor de Ciencia, se muestra al público la figura de mujeres como Hipatia de Alejandría, Sofia Kovalévskaya, Ada Lovelace o Maria Sibylla Merian, cuyos nombres han quedado ensombrecidos frente a los de otros colegas masculinos.