Ya no es una cuestión de si llegaremos, sino de cuándo. Los seres humanos irán a Marte, colonizarán el planeta, establecerán comunidades y se reproducirán por generaciones. A medida que las colonias se amplíen, la población crecerá y, en consecuencia, se presentarán todos los problemas relacionados con la convivencia de nuestra especie. De simples peleas a verdaderos crímenes. Ahora mismo la seguridad marciana podría no parecer una prioridad. Antes habrá que encontrar aire y agua suficientes, por ejemplo. Aun así, más vale prevenir que lamentar.
Los humanos también serán humanos en Marte. Con todas sus fortalezas y debilidades. Incluyendo la predisposición natural a violar la ley y prevaricar en pro de intereses particulares. Los robos, las violencias y los asesinatos también ocurrirán en el planeta rojo. Sin embargo, para la policía local podría ser mucho más complicado resolver estos casos.
Independientemente del código penal marciano, que no sería tan diferente del terrestre, lo que realmente cambiará serán los métodos de investigación. Policías y detectives en Marte tendrán que trabajar en un mundo con diferentes leyes físicas. Se enfrentarán a condiciones atmosféricas muy similares a las que se encuentran en la Antártida o en las regiones del extremo norte. Todo será distinto y mucho más complicado.
Marte, un planeta inhóspito
A pesar de ser el planeta con el clima más similar al de la Tierra, las condiciones atmosféricas de Marte son bastante prohibitivas para el ser humano. Las temperaturas oscilan entre los -140° C en los inviernos polares y los -14° C en verano. Sus dimensiones son intermedias entre las de nuestro planeta y las de la Luna. La inclinación del eje de rotación y la duración del día son similares a la terrestre. Su superficie presenta formaciones volcánicas, valles, desiertos de arena y casquetes polares, además de formaciones geológicas que sugieren la presencia de una hidrosfera en un pasado distante. Puede que haya agua congelada en el subsuelo, pero no es nada seguro.
La muy baja densidad de la atmósfera no consigue detener la mayoría de los meteoritos, que por lo tanto alcanzan el suelo con más frecuencia que en la Tierra. Es un planeta desierto y árido, caracterizado por tormentas de arena periódicas y particularmente violentas. En resumen, no es exactamente un paraíso para el veraneo.
Para los fanáticos de las series de televisión, se trata de un escenario que podría recordar al que protagoniza ‘Fortitude’. Donde el hielo polar enmarca los crímenes más inexplicables. Como explica en la revista ‘The Atlantic’ Christyanne Darwent, una arqueóloga que trabaja en las gélidas regiones de Canadá, utilizadas para preparar a los astronautas a los viajes hacia Marte, estas condiciones climáticas lo cambian más o menos todo.
Investigaciones muy complicadas
Por ejemplo, en el frío marciano, los cadáveres aguantarían más tiempo antes de pudrirse. Al menos la superficie que no esté expuesta a los vientos. Esa parte, de hecho, se volvería irreconocible de forma muy rápida. En la atmósfera de Marte, el ADN envejece de manera diferente, lo que podría afectar a la nueva genealogía genética. La sangre que salpica de las heridas se diseminaría de manera inusual debido a la baja gravedad. Hasta el mismísimo Dexter Morgan tendría problemas para recomponer la escena de un crimen con sus famosos hilos rojos.
El polvo también se debería analizar de forma diferente, debido a la carga electrostática del planeta. Cambiaría incluso la datación por radiocarbono, porque la composición química de la atmósfera marciana cambia mucho en comparación con la de la Tierra. Por lo tanto, sería mucho más complicado poner una fecha precisa a los crímenes más antiguos.
Además, hay que añadir que el ambiente es tan hostil que será difícil distinguir entre casos de asesinatos y muertes naturales. Un envenenamiento se podría explicar con una simple exposición a los percloratos, agentes químicos abrasivos muy comunes en las rocas del planeta. «Salió a pasear y nunca volvió», podrá afirmar con facilidad el asesino, sin temor a ser descubierto.
Un ‘Far West’ espacial
Incluso después de dos o tres generaciones de colonos, es probable que todavía queden lugares en el planeta casi totalmente inaccesibles o, por lo menos, no mapeados. Sitios perfectos para esconder cadáveres o bienes robados. U organizar bandas criminales a lo ‘Mad Max’.
Como pudimos ver en la película ‘Interstellar’, sería suficiente manipular un poco al equipo de supervivencia para matar a una persona. Sin que nadie pueda averiguar si se trató de un accidente o de casualidad. Una junta que salta, un tanque de oxígeno que no cumple con su deber, un pequeño agujero en el traje espacial. En fin, podría haber muchas formas de encubrir un asesinato.
Un escenario quizás un poco distópico, que nos sugiere una especie de ‘Far West’ espacial. Un planeta sin ley, poblado por colonos sin escrúpulos. Después de todo, casi todas las regiones fronterizas de la exploración terrestre nacieron de esta manera. Desde la fiebre del oro en la costa este de los Estados Unidos a la colonia penal británica que dio lugar a la Australia contemporánea. Lo que está claro es que un ‘CSI Marte’ podría ser muy entretenido.
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