En enero, cuando el mundo descubrió la presencia del nuevo coronavirus, la Fundación Bill y Melinda Gates destinó 10 millones de dólares de ayuda a los operadores sanitarios de China y África. En febrero, Bill Gates, en un artículo publicado por el ‘New England Journal of Medicine‘, avisó de que la COVID-19 se estaba comportando como una posible pandemia, de las que ocurren una vez cada 100 años. Su Fundación es la financiadora privada más importante de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, para los conspiracionistas es el ‘culpable’ de este desastre planetario.
Precisamente su gran interés en la lucha contra la pandemia ha hecho que el fundador de Microsoft ocupara el lugar de George Soros en la imaginación de los paranoicos. De hecho, ya se sabe que la filantropía no es ‘natural’, por lo que debe haber algo oculto detrás de ella. Las acusaciones contra Bill Gates son varias. Habría creado el coronavirus para ganar dinero con la vacuna. Y tendría un plan diabólico para exterminar a millones de personas.
Según un análisis publicado por el ‘New York Times’, entre febrero y abril, las teorías de la conspiración relacionadas con Bill Gates se mencionaron 1,2 millones de veces en las redes sociales. Y desde que el magnate criticó a Donald Trump por retirar el apoyo estadounidense a la OMS, su figura ha sido fuertemente atacada por la extrema derecha. Para descubrir el origen de estas leyendas en torno a la figura del magnate, hay que volver atrás unos 10 años. En África.
¿Cuándo y dónde nace la teoría de la conspiración?
En 2010, los tabloides ghaneses dieron amplio espacio a la denuncia de Mame-Yaa Bosumtwi, una exempleada de un proyecto organizado por el gobierno de Ghana y la Universidad de Columbia. Y parcialmente financiado por la Fundación Bill y Melinda Gates. La mujer, tras ser despedida, dijo que la organización estuvo probando un fármaco anticonceptivo sobre las mujeres de una aldea en Navrongo. Como parte de un experimento para el control de la población.
En realidad, el proyecto consistía en proporcionar móviles para mejorar la asistencia sanitaria a mujeres y niños de zonas rurales. Bosumtwi había tenido fricciones con otro miembro del equipo, James Phillips, demógrafo de la Universidad de Columbia. Y cuando su contrato no fue renovado, presentó una queja millonaria que fue rechazada. Entonces decidió recurrir a los tabloides locales.
Nunca presentó ninguna prueba para sostener estas acusaciones, que, sin embargo, fueron suficientes para poner el proyecto y las personas involucradas en la picota. En todo el país, aparecieron carteles con las caras de James Phillips y la palabra «Wanted«. Las reiteradas amenazas de muerte obligaron a dos miembros del equipo de investigadores a abandonar el país cruzando la frontera con Burkina Faso.
La misma acusación fue repetida en 2011 por una organización que se ocupa de los derechos de las mujeres en los Estados Unidos. El Rebecca Project for Human Rights publicó un informe titulado ‘Non-Consensual Research in Africa: The Outsourcing of Tuskegee’. Sin presentar ninguna evidencia, se volvían a repetir las acusaciones de Mame-Yaa Bosumtwi. Lo que casi nadie dijo es que Kwame Fosu, autor de ese informe, también es el padre del hijo de Mame-Yaa Bosumtwi. No obstante, los antiabortistas aprovecharon para atacar a Gates.
Bill Gates quiere reducir la población mundial
En un TED Talk de 2015, Bill Gates advirtió que el mayor riesgo para la humanidad no era una guerra nuclear sino un virus. El vídeo cuenta con casi 30 millones de visualizaciones. El filántropo se limitaba a difundir nociones científicas de dominio público, pero muchos entendieron sus palabras como una especie de premonición. Algunos vieron la ‘prueba’ de que Gates había orquestado la pandemia para tomar el control del sistema sanitario mundial. Y reducir la población del planeta. No se entiende bien con qué beneficios, por cierto.
La verdad es que su fundación aborda cuestiones relacionadas con la superpoblación global, pero no para exterminar a los habitantes del planeta. La solución propuesta por Bill Gates es disminuir la tasa de mortalidad infantil. Por debajo de cierto umbral, explica el magnate en una entrevista en ‘Forbes’, el crecimiento de la población tiende a estabilizarse. Cuando la mortalidad infantil es mayor, los padres deciden procrear con frecuencia, no para tener familias numerosas, sino para asegurarse de que al menos un porcentaje de sus hijos sobreviva. Es una teoría controvertida que existe desde la década de 1970 y se conoce como ‘the child survival hypothesis’.
Gates también es acusado de haber patentado la vacuna contra el SARS-CoV-2. En un vídeo eliminado repetidamente de YouTube, un hombre promete «mostrar las verdaderas patentes que muestran la realidad del coronavirus”. La acusación es que la vacuna ya existiría y que habría sido patentada primero en los Estados Unidos y luego en Europa. En el segundo caso, la patente se habría otorgado en 2019 al Instituto Pirbright, financiado por la Fundación Bill y Melinda Gates. Por supuesto, toda la información contenida en el vídeo es falsa, incluidos los ‘remedios’ propuestos para tratar la enfermedad: beber agua caliente y tomar el sol.
El ‘rey’ de las vacunas
Pero hay más: ’sus vacunas’ habrían causado la parálisis de 496.000 niños en la India. Esta es otra ‘noticia’ muy difundida que ha sido desmentida por varias webs de fact checking. El bulo parte de una teoría de la conspiración apoyada por grupos que se oponen a las vacunas obligatorias y por Robert F. Kennedy Jr. El nieto del expresidente de Estados Unidos, de hecho, es uno de los principales contribuyentes a la publicidad contra las vacunas en Facebook.
Desde el año 2000, la Fundación Bill y Melinda Gates ha financiado una campaña para derrotar a la poliomielitis en la India, este objetivo se logró en 2014. Entre las posibles reacciones adversas a la vacuna (1 caso por cada 2,7 millones de dosis) se encuentra la aparición de poliomielitis paralítica. Entre 2000 y 2017, frente a millones de vacunas suministradas, los datos oficiales de la OMS hablan de 17 casos.
Bill Gates se ha convertido en el ‘culpable’ de la pandemia porque es una persona conocida, explica el ‘New York Times’. Es la figura perfecta para desempeñar el papel de ‘titiritero global’, el chivo expiatorio ideal. Además, es muy rico. El problema es que estas acusaciones podrían usarse para futuras campañas ‘No Vax’ para disuadir a las personas respecto al uso de una vacuna contra la COVID-19. Y eso que nadie ha protestado nunca por el Windows Vista.
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Cuando uno hace algo bueno por el mundo desprendidamente, aparece un 10% de gente (que hacen que fueran mas) de oposicion con intereses egoistas y mezquinos pero que dan otra explicacion para confundir y convencer a los demas
La solucion es crear un grupo que investigue a la oposicion y blinde a las buenas acciones.
Tanta es la estupidez humana que termina germinando situaciones tan exóticas como esta.
Esa es la envidia humana, contra eso no hay vacuna ninguna, tendriamos que desaparecer todos de este planeta y que viniera otra clase de gente. Parece mentira la ignorancia de las personas dando crédito a esas falsas noticias. Cual sería el interés de Bill Gates y Sra. de que desaparecieran los humanos?? acaso ellos no son humanos??? y tampoco son muy jovencitos para vivir X años en este `planeta .
Que tristeza que no sepamos apreciar lo que esas personas están haciendo ayudando a la gente con su fundación. Porqué no apreciamos todo esto y vivimos y dejamos vivir . Soy una defensora total de los Gate, de los Amancio Ortega, de los que teniendo mucho dinero ayudan al mundo, y lo principal que nadie repito NADIE, les ha regalado lo que se lo han trabajado y ganado por méritos propios.
Que vivan muchos años y puedan seguir ayudando y que no les perjudique ni los altere las malas noticias que circulen por el planeta