Un proyecto del artista digital Dries Depoorter localiza instantes compartidos en Instagram a través de las cámaras de vigilancia de las ciudades.
Byung-Chul Han que la transparencia es “el imperativo sistémico del régimen de la información”, pero en realidad es “instrumento de vigilancia y sometimiento” que explota nuestra libertad y comunicación.
Dice el filósofo surcoreanoSe trata de lo que se ha dado en llamar «capitalismo de vigilancia», que apuntala su poder en lo que Han llama «panóptico digital», un sistema de vigilancia en el que los sujetos colaboran de manera activa, a través de su necesidad de exhibicionismo y voyeurismo.
vuelve el gran hermano
Este auge de la vigilancia electrónica ha reanimado en los últimos tiempos el interés por la premonitoria novela 1984, de George Orwell. Nuevos lectores quedan fascinados por su infierno rigurosamente vigilado en el que nadie escapa a las omnipresentes pantallas, los ojos del Gran Hermano. En este escenario de pesadilla, basado en el panóptico de Bentham, Orwell avanzó la sociedad del control actual.
Tal como explica Pablo Francescutti, sociólogo de la Universidad Rey Juan Carlos, «que el reality show Gran Hermano trivializara el asunto con sus concursantes felices de pavonear su inanidad ante la audiencia no ha evitado que cunda la alarma ante la parafernalia digital que registra nuestros gustos, opiniones y movimientos hasta un extremo inimaginable para la dictadura de 1984″.
Una alarma que suena con mayor estruendo ante propuestas como la del artista Dries Depoorter.
cámaras de vigilancia para «cazar» a instagramers
El proyecto se llama The Follower y, gracias a la inteligencia artificial, ha logrado localizar tanto personas anónimas como influencers de más de 100.000 seguidores a través de las imágenes captadas por cámaras de vigilancia situadas en lugares de especial interés para quienes buscan el selfie perfecto.
Para ello, tal como explica en su web, graba una selección de imágenes públicas de cámaras de vigilancia durante semanas y, posteriormente, las relaciona con las ubicaciones que se utilizan para etiquetar fotografías en Instagram.
El resultado es inquietante y muestra cómo Orwell se equivocó poco cuando escribió eso de «El Gran Hermano te vigila». Lo curioso de esta época es que se lo pongamos tan fácil.
máquina expendedora de seguidores de redes sociales
Esta obra es una más del artista belga en la que reflexiona sobre el exhibicionismo, la vigilancia y la transparencia en redes sociales.
Hace años, lanzó “Quick Fix”, una máquina expendedora de likes o seguidores en solo unos segundos y que se puede configurar para su uso en las redes más populares: Instagram, Facebook, Twitter y Youtube. Por solo 4 euros se pueden conseguir 1.000 likes en Instagram y el artefacto funciona de verdad.