El cambio climático está aquí y, cada año que pasa, parece que se alargan los periodos del año sin lluvia, algo que afecta de manera directa a la contaminación en las grandes ciudades. Llega diciembre y luce el Sol, enero y no hay señales de lluvia, febrero y sacamos las camisetas del armario…Mientras tanto, una gran boina de contaminación se cierne sobre las grandes ciudades. ¿Qué podemos hacer? La startup mexicana Biomitech propone instalar en los núcleos urbanos unas torres de microalgas que podrían filtrar el aire como lo harían 400 árboles.
Esta empresa, que fue ganadora del reto Heineken Green Challenge durante el festival de emprendimiento INCMtY 2018, organizado por el Instituto Tecnológico de Monterrey, propone la instalación en las ciudades de una torres, llamadas Biourban, que funcionan como un sistema de biofiltración de agentes contaminantes atmosféricos,que mejoran la calidad del aire, como si se trataran de árboles artificiales.
microalgas contra la contaminación
Estas torres funcionan con microalgas que capturan y filtran los contaminantes atmosféricos mediante fotosíntesis. Por tanto, según explica su fundador, el joven emprendedor Carlos Monroy Sampieri, al utilizar organismos vivos no se altera la huella medioambiental.
Actualmente existen 4 modelos de torres y, las más avanzadas, pueden filtrar el mismo aire que más de 360 árboles. Las torres de uso interior miden 2 metros de alto y 15 centímetros de diámetro, mientras que las de uso externo e industrial miden 4 metros de alto y 2.75 metros de diámetro.
Biomitech, que empezó su actividad comercial este año, ya ha instalado una de sus torres en el estado de Puebla, en una de las vías más congestionadas de su capital. Ahora la empresa busca expandirse por Latinoamérica, Europa y Asia.
Según la OMS, se calcula que 1,3 millones de personas mueren cada año a causa de la contaminación atmosférica urbana. La contaminación del aire representa un grave problema de higiene del medio que afecta a los habitantes de los países en desarrollo y desarrollados. Los residentes de las ciudades donde hay niveles elevados de contaminación atmosférica padecen más enfermedades cardiacas, problemas respiratorios y cánceres del pulmón que quienes viven en zonas urbanas donde el aire es más limpio.