A finales de marzo Juan Agüí y Carolina Santamarta se enteraron a través de unos familiares de la iniciativa ResistenciaTeam, el equipo de trabajo que ha conseguido diseñar en poco más de 15 días los primeros respiradores autónomos de código abierto basados en el sistema Jackson Rees.
Viendo los resultados de este proyecto, ninguno de los dos dudó en ver cómo podían contribuir en la lucha contra la pandemia por el coronavirus con los medios a su alcance. En su caso: las impresoras 3D que tenían paradas en su escuela de robótica, TeslaCool Lab, desde el 11 de marzo, día en el que se cerraron todos los colegios de la Comunidad de Madrid.
Al mismo tiempo, Guillermo Martínez, fundador de Ayudame3D, también empezaba a trabajar para combatir el avance de esta enfermedad. El reciente ganador del Premio Social Fundación Princesa de Girona 2020 cuenta a Nobbot que todos los voluntarios que forman parte de su ONG ahora emplean sus impresoras 3D para fabricar máscaras que impidan la expansión del coronavirus.
Trabajo colaborativo
Tanto Juan como Carolina son ingenieros, pero el diseño y fabricación de respiradores se quedaba grande para ellos, así que “buscamos en Twitter qué podíamos hacer y dimos con covidmadrid (Makers de Madrid contra el Coronavirus). Desde aquí, nos unimos al grupo de Telegram. Y, una vez dentro, al equipo de nuestro distrito, que es Fuencarral-El Pardo”, explica Juan Agüi a Nobbot.
Ese punto de reunión para makers de Madrid en internet es solo uno de los que la plataforma Coronavirus Makers tiene abiertos en toda España, y que empezaron a funcionar a mediados de marzo nada más declararse el estado de alarma por la expansión de la COVID-19.
En ese momento, un grupo de personas de diferentes perfiles y con experiencia en medicina, biotecnología, impresión 3D y diseño industrial, entre otras disciplinas, decidió compartir su conocimiento y experiencia en un grupo de Telegram, a través del canal @coronavirus_makers, y en una web. Ante la falta de recursos en los hospitales para afrontar esta crisis sanitaria, el objetivo era diseñar de manera colaborativa respiradores artificiales con tecnología 3D y otras soluciones. El 13 de marzo se creó el primer grupo y en cuatro días ya formaban parte de él 1.500 personas.
En total, hay 50 proyectos para crear material, hardware o software. Todos ellos buscan dar una respuesta rápida a las actuales necesidades del sistema sanitario, como filtros, máscaras, mascarillas, ventiladores o respiradores automáticos. Cada proyecto es desarrollado en un canal de Telegram. Cada uno de ellos, a su vez, cuenta con varios coordinadores que organizar los avances para crear los prototipos.
Organización por proyectos
Para el reparto de estos prototipos se ha creado una red regional. Está organizada por comunidades y provincias para que la distribución sea lo más ágil posible. “En Fuencarral-El Pardo fabricamos exclusivamente viseras, el tema de respiradores [coordinados a través del foro A.I.RE] nos parece muy serio como para dejarlo en manos amateurs”, reconoce Agüí.
“Se fabrican dos tipos de visera: una que sirve para quirófanos y salas de reanimación y otras que imprimimos para el Hospital Gregorio Marañón que es para personal menos expuesto”. En el momento de escribir este texto el equipo de TeslaCool Lab había impreso 60 viseras. De ellas, 30 han ido al Gregorio Marañón y otras 30 del modelo de Covidmadrid.
La forma de saber qué se necesita es muy sencilla. En cada comunidad un coordinador está en contacto con el personal sanitario que pide recursos y las empresas que ofrecen materiales. “En el caso de nuestro distrito, tenemos una red de farmacias que colaboran como punto de recogida. Todas las tardes de lunes a viernes una persona recoge el material impreso. Tras desinfectarlo, se monta para después repartirlo donde lo hayan solicitado. Las solicitudes suelen entrar por el grupo de Madrid que es el que se encarga de redirigirlas a los grupos zonales. Por ejemplo, desde una residencia se hace el pedido y los administradores lo gestionan”, describe Juan Agüí.
Cada maker pone su impresora y el material necesario. A quien quiere colaborar sin ser impresor se le pide que compre PVC para las pantallas o plástico para imprimir. “Empresas como Sicnova han regalado PLA, otras como BQ han puesto el suyo muy barato y en Impresoras3d venden material que mandan directamente a los impresores”. La iniciativa es abierta, todo el mundo puede participar, aunque Agüí advierte de que la impresión en 3D y su manejo exige mucha experiencia.
De prótesis 3D a máscaras de protección
De una forma similar trabajan en Ayudame3D, aunque en este caso todo se coordina desde un espacio creado expresamente en la página web de esta ONG: A3D covid. “Las más de 60 personas voluntarias que forman parte del proyecto se están volcando en la impresión de máscaras de protección, y a ellas se puede unir todo aquel que quiera contribuir desde su casa”, explica Martínez.
Su idea inicial era fabricar piezas para los respiradores pero, al igual que les pasó a Juan y Carolina, enseguida se dio cuenta de que era demasiado complejo para los conocimientos con los que contaba. “Lo que nos interesaba era dar una respuesta lo más rápida posible a la situación de emergencia que estamos viviendo”.
Trabajan bajo pedido, pero también fabrican antes de recibir las solicitudes para tener las máscaras listas cuando sean necesarias. Las distribuyen en residencias para mayores, centros de salud, ópticas o farmacias. “No son EPIs (equipos de protección individual)”, quiere aclarar Martínez. “La máscara es un PVC que sirve como protección añadida a las medidas que de por sí han de tomar las personas que están expuestas al virus, pero no están pensadas para usar en las UCIs”.
Los voluntarios repartidos por toda la geografía española ponen sus impresoras 3D y el PLA. “Si alguno necesita material adicional nosotros se lo proporcionamos de forma gratuita. También hemos cedido impresoras 3D que recuperaremos cuando finalice la emergencia sanitaria y continuar con la fabricación de ‘trédesis’”. Desde Ayudame3D ya llevan fabricadas y repartidas más de 8.000 unidades, y ellos mismos también se encargan de la logística para los envíos.
En Nobbot | ¿Cómo será el mundo tras el coronavirus?
Imágenes | TeslaCool Lab, Ayudame3D
Gracias por el artículo.
Es bueno dar a conocer proyectos, de tanta gente anónima, que ayudan a mejorar esta difícil situación.