El uso de la realidad aumentada puede dar una nueva vida a las páginas de papel de los libros del futuro.
Si bien es cierto que estamos muy lejos del fin del formato tradicional de lectura, el cambio de hábitos impulsado por el desarrollo tecnológico amenaza el privilegiado lugar que ocupa el papel en nuestras estanterías.
la competencia del papel
Según el último informe de la la Federación del Gremio de Editores de España, la edición digital supuso, en 2021, el 5,2% de la facturación total, llegando a los 134,79 millones de euros en ventas. Esta cifra refleja un aumento del 6,8% con respecto al año anterior. El número de títulos editados también se incrementó en un 1,2%, con un total de 24.176 títulos.
Además, el papel también compite con otro soporte como el audiolibro, cuya facturación mundial se multiplicará por cuatro hasta 2030, pasando de los 5.000 millones a los 20.000 millones de dólares, según previsiones de Podimo.
En España, los audiolibros crecen con un modelo basado en las suscripciones mensuales, como Spotify o Netflix. Tienen ya en España dos millones de usuarios habituales, una cifra que consolida el crecimiento de este contenido de audio en el país, que apuesta por hacer de las suscripciones mensuales su método principal de consumo, siguiendo el camino de otros contenidos audiovisuales o de música en ‘streaming’.
Ante este panorama, se podría pensar que el libro de papel necesita una reflexión para desarrollar nuevas propuestas que enriquezcan la experiencia de la lectura entre un público cada vez más tecnificado.
realidad aumentada para una lectura enriquecida
Por lo menos es lo que piensan en la Universidad de Surrey donde un equipo de investigadores trabaja en un nuevo formato híbrido -el «a-book»- que, según afirman, «puede ser el futuro de muchos géneros de lectura, desde viajes y turismo hasta educación».
«Esta tecnología existe para ayudar al lector en una comprensión más profunda del tema escrito y obtener más información a través de medios digitales sin arruinar la experiencia de leer un libro en papel», explican.
Sin cableado visible, los libros de realidad aumentada permiten a los lectores activar contenido digital con un simple gesto (como deslizar un dedo por un menú situado en los márgenes o pasar una página), que luego se mostrará en la pantalla del smartphone o la tablet.