La educación digital ha experimentado un impulso exponencial durante la pandemia y jugará un papel esencial para afrontar los retos del futuro. Sin embargo, nadie se debe quedar atrás en este proceso de transformación. Así se ha puesto de manifiesto en un encuentro organizado por diario EL ESPAÑOL y la Universidad CEU San Pablo.
El evento ha contado con la presencia de Rosa Visiedo, rectora de Universidad CEU San Pablo y directora de Universidades CEU; María Eugenia de Blas, responsable de RSC en Orange España; Gonzalo Romero, Head of Education, Google Spain; Javier Miranda, responsable del área de Formación y Empleo de DigitalES; Juan José Juárez, Senior Project Manager de la Fundación Bertelsmann.
En su intervención, Gonzalo Romero ha explicado que se ha producido un choque entre dos placas tectónicas, que son la educación y la tecnología, lo que ha generado una nueva geografía de la que “nunca antes habíamos sido testigos y que traerá grandes cambios”.
En esta línea, Javier Miranda ha destacado que el uso intensivo de la tecnología en el ámbito educativo durante el confinamiento ha permitido “mejorar la toma de decisiones, aprovechar mejor los recursos y comprobar que se aprende en equipo y no en solitario”.
educación digital e inclusiva
María Eugenia de Blas, por su parte, ha recordado que la digitalización en el sector educativo debe de ser inclusiva. “Es muy importante que nadie se quede atrás en este proceso de transformación digital impulsado por la pandemia. Sus bondades tienen que llegar a todos los extractos de la sociedad y para eso hay que poner el foco en una enseñanza digital, de calidad e inclusiva”, señaló.
Los ponentes han puesto de manifiesto que esta situación ha generado nuevos perfiles profesionales y nuevas competencias. Por lo tanto, abogan por la importancia de formar a los estudiantes para que adquieran estas habilidades «que resultan esenciales para la inserción laboral», explicó Rosa Visiedo.
“Todos debemos aumentar nuestras habilidades digitales”, pero algunas de estas serán para todas las personas, y en otros casos habrá que ir generando otras específicas para cada titulación. La Formación Profesional Dual será herramienta clave en este proceso, según confirman estos expertos, aunque el foco no se debe de centrar exclusivamente en los centros educativos. «Las empresas tienen la responsabilidad de invertir en sus profesionales para contribuir a que sus empleados estén actualizados», afirmó Gonzalo Romero.
En definitiva, todavía queda mucho por hacer en este ámbito, pero todos los ponentes han coincidido en que la tecnología a corto plazo se va a convertir en un instrumento educativo esencial y que va a cambiar el actual concepto de talento.