La situación provocada por el coronavirus ha cambiado, no solo nuestras vidas, sino nuestra forma de enfrentarnos a la rutina. El teletrabajo se ha establecido como una medida más que necesaria para la continuidad de muchas empresas, dejando de ser una opción para convertirse en una necesidad.
Elena Mora es directora de Títulos Propios y Estudios Avanzados de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR). Su experiencia en el mundo de la educación hace que abogue firmemente por la renovación constante y el estudio. Para ella, ha llegado el momento de reinventarse, tratando así de superar una etapa que no está siendo sencilla para nadie.
-La crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha hecho que muchas personas pierdan sus empleos. ¿Qué podemos hacer si nos hemos quedado sin trabajo o sin negocio y nos toca reinventarnos?
Mi primera recomendación sería no perder la calma y sobre todo no dejar que esta situación afecte a la autoestima. Casi todas las personas, pasan en algún momento de su vida profesional por una etapa como esta y normalmente si se enfoca correctamente suele quedarse en eso, solo una etapa de la que además se puede salir fortalecido.
Por otra parte, y una vez que se consigue superar en las primeras semanas la extraña sensación de no tener una agenda que llene nuestra jornada laboral, toca reflexionar. Me refiero a pensar de una manera analítica sobre la trayectoria profesional que se ha llevado a cabo, extraer de ella, los aprendizajes positivos y negativos y decidir si se quiere continuar con el mismo rumbo profesional.
En caso de que nos guste nuestra carrera profesional y queramos seguir con esta trayectoria, debemos analizar qué skills o habilidades están demandando las empresas para posiciones similares y comprobar si estamos suficientemente preparados para cubrirlas o nos hemos quedado un poco obsoletos. Normalmente, si hemos pasado una larga etapa, con una actividad laboral intensa, es bastante probable que no hayamos tenido tiempo de actualizarnos. Pues bien, este es el momento de hacerlo, y aquí es donde la formación juega un papel fundamental.
Si por el contrario, queremos dar un giro a nuestra carrera y cambiar de rumbo profesional, este es también el momento ideal para hacerlo, pero debemos formarnos y adquirir las competencias necesarias en esa nueva posición.
¿Teletrabajo como forma de vida?
-El teletrabajo se está consolidando como una alternativa fuerte en el mundo laboral. ¿Ha dejado de ser una opción para convertirse en una necesidad?
Es evidente que en muchos casos el teletrabajo ha venido para quedarse. Esta situación ha puesto a prueba a todas las empresas y trabajadores y en casi todos los casos el resultado ha sido muy positivo. Sin embargo, no hay que perder de vista que las personas nos movemos por emociones y necesitamos establecer relaciones personales en nuestro entorno y, en el trabajo también. Una conversación personal, un gesto, una sonrisa, pueden cambiar el rumbo de una negociación. Por tanto, yo diría que lo ideal es encontrar un equilibrio entre el teletrabajo y el trabajo presencial. Se puede tener unos días de la semana de teletrabajo y centrar otros días las reuniones en la oficina.
«Esta situación ha puesto a prueba a todas las empresas y trabajadores y en casi todos los casos el resultado ha sido muy positivo»
-¿Qué ventajas competitivas puede aportar a las empresas?
El teletrabajo o un modelo híbrido, al facilitar la conciliación laboral y familiar, provocan bienestar y felicidad en el empleado lo que impacta directamente en su productividad. Un empleado al que se le facilita su estilo de vida, es un empleado feliz. Y un empleado feliz, es un empleado comprometido y un empleado productivo, además de un gran embajador de la marca. Por otra parte, puede suponer un ahorro de costes de estructura e inmobiliarios para las empresas.
-¿Qué importancia tiene la digitalización en este nuevo entorno laboral que se plantea después de la pandemia?
Está claro que esta pandemia ha cambiado muchos negocios. Acabará con algunos y dará pie al nacimiento de otros nuevos. Lo que sí parece claro es que la digitalización ocupará un papel fundamental en todos ellos, como se está viendo en el sector de la formación. Ahora la formación online ha ocupado un gran protagonismo y en muchos casos, ha pasado a ser la primera opción para los alumnos.
-Los procesos tecnológicos se han aplicado también al sector de la educación. ¿No supone una pérdida para el alumno realizar una formación exclusivamente por vía telemática?
Si está bien planteada no hay por qué preocuparse. Nosotros, en UNIR, que llevamos años desarrollando un modelo pedagógico especialmente diseñado para la formación online, hemos conseguido incorporar todas las ventajas del modelo presencial. Generalmente la primera inquietud es poder hacer un buen Networking pero nuestros alumnos crean una auténtica comunidad y mantienen los lazos tiempo después de haber terminado sus estudios.
-¿Cuáles serán las profesiones más demandadas en un futuro inmediato? ¿Y en un futuro lejano?
Eso depende de cada sector, todos van a sufrir evolución y cambios, pero no cabe duda que la tecnología va a impactar fuertemente en todos ellos y va a modificar la manera de hacer las cosas. Por tanto, todos aquellos que estén vinculados a las tecnologías de vanguardia estarán muy cotizadas.
-Por último, me gustaría que saber qué actitud debemos adoptar ante una situación cambiante y cargada de incertidumbre que deja muchos empleos en el aire.
Si es posible, estudiar, es la mejor manera para afrontar lo que pueda llegar.
Está claro que la sociedad no puede depender exclusivamente del teletrabajo, pues hay profesiones que solo pueden operar «in situ» y solo pueden enviar a teletrabajar a los empleados de la parte administrativa.
Muy interesante, en mi entorno el teletrabajo se está imponiendo con fuerza y la verdad es que es una buena alternativa que debería conservarse. Ya que en realidad proporciona más libertad. El problema viene en sectores de servicios como el mío en los que el teletrabajo es prácticamente imposible. Durante la pandemia ya me he visto solucionando algún problema por videollamada, pero la gran mayoría de averías necesitan asistencia presencial. Deberíamos investigar más sobre cómo afrontar el contacto directo en trabajos presenciales que se realizan directamente en los hogares para futuras pandemias. ¿Qué opináis?
Muy buen artículo. Me parece interesante somo el tema de compaginar teletrabajo y trabajo presencial. Aprender lo mejor de estos dos polos y saber entremezclados. Muy bueno.
Excelente artículo Elena, ¡felicidades!
No cabe duda que todo ha cambiado a raíz del COVID19, y el trabajo es el más impactado.
Me gustó mucho el artículo, trabajo en el área administrativa en la Universidad del Istmo en Guatemala, y me interesaría poder actualizar mis estudios a distancia en esta área y en la de Gestión de Personal, y dada la magnífica relación que existe entre ambas Instituciones, agradeceré ponerme en contacto con alguien que me pueda brindar más información, sobre mi interés.