En la sociedad actual, más digital y comercial que nunca, el mercado de datos biométricos de individuos ya es una realidad. Es más, podemos hablar de un sector con un claro líder: el escaneo del iris.
Esta información personal y única para cada ser humano se ha convertido en un preciado producto, que cotiza a niveles históricos en cuestión de criptomonedas o bitcoins, y que ya se trata como si fuera oro.
Pero, te preguntarás en qué consiste esta práctica o cuál es el fin de escanear el iris del ojo de una persona. Muy sencillo: los expertos aseguran que es el mejor dato biométrico que existe.
Nuestro iris puede convertirse en la llave más segura del mundo, en la contraseña perfecta para acceder a cuentas y plataformas digitales, pero también para abrir puertas con accesos restringidos, identificarte de forma segura y mil aplicaciones más.
Y si encima, te pagan por el escaneo de tu iris. ¿Qué más se puede pedir? Esto es lo que debieron pensar miles de personas que vendieron sus datos biométricos a cambio de criptomonedas a la empresa Worldcoin.
@silvialealtech NOTICIA DE ÚLTIMA HORA 👇 ⚠️ La Agencia Española de Protección de Datos ha decidido BLOQUEAR Worldcoin en España ⚠️ Es la primera vez que la agencia toma una decisión así, en base al artículo 66 del Reglamentos Europeo de Protección de Datos. Porque… ¿cuál es el verdadero peligro con WorldCoin? 👇 Al igual que la forma de andar o la voz son datos biométricos, el iris es un dato muy estable y se mantiene intacto durante toda tu vida 😅 Si los sistemas que almacenan la información codificada son vulnerables y los ciberdelincuentes llegan a tener acceso a los datos, ¡tendrían la capacidad de suplantar la identidad de una persona! 😱 Y esto no es como que te roben el dni, la tarjeta sanitaria o la de crédito, que la cancelas y la cambias en un santiamén y se acabaron los problemas… ¡El iris no lo puedes cambiar! 👁️ Así que sí…ándate con ojo 😉 #worldcoin #tecnologia #tecnologiainnovadora #tecnologiafuturista #tecnologiatiktok #tecnologiadelfuturo #silvialeal ♬ sonido original – Silvia Leal
En concreto y en España, más de 400.000 personas han vendido los datos de su iris y la app que gestiona el proceso está entre las 10 más descargadas en App Store.
Ahora, este proyecto ha cerrado tras recibir acusaciones que van desde denuncias por vender información, hasta clientes que aseguran que no habían consentido la venta de sus datos.
El escaneo del iris ya es el mejor dato biométrico
Para entender por qué se ha puesto tan de moda el escaneo del iris, hay que entender que la información obtenida se considera uno de los métodos de autenticación biométrica más precisos y seguros hasta la fecha. Incluso más que la más usada hasta ahora: la huella digital. De hecho, es la que aparece en tu Documento Nacional de Identidad o DNI.
Y es que, el patrón que se obtiene tras el escaneo de iris cumple todas estas características y ventajas:
- El patrón del iris de cada persona es único y diferente. Los datos de información biométrica que nos da son más precisos y diferenciadores que los de las huellas dactilares.
- Casi infalsificable gracias al gran número de detalles del patrón.
- El rápido avance de la tecnología biométrica hace que el escaneo del iris sea rápido y precioso. Lo mismo ocurre con su verificación.
- Los expertos lo consideran altamente seguro como sistema de contraseña, verificación de identidad y acceso. Además, se presupone que las empresas hacen el escaneo con luz infrarroja y los patrones se encriptan antes de almacenarse.
- Es invariable. Es decir, no sufre grandes cambios a lo largo de la vida de la persona.
Esta es la cara bonita del escaneo del iris, pero como todo en la vida, tiene sus peligros. Sobre todo, si la empresa encargada del escaneo y gestión de los datos biométricos viola las leyes de privacidad y los usa con intereses comerciales o; incluso, los vende a otras empresas.
Por ello, es importante que conozcas la polémica que rodea el cierre de Worldcoin.
Worldcoin: escaneo de iris, criptomonedas, cierre y escándalo
Worldcoin nació como una startup, en Estados Unidos, y bajo el liderazgo del padre y director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman. Ofrecía a la sociedad crear una «identidad universal» basada en el escaneo del iris de las personas. Es decir, que todos los accesos digitales se hicieran a través de los datos de tu iris.
Para ello, Worldcoin escanea tu ojo y a cambio te daba una pequeña compensación económica, pero no en euros, sino en criptomonedas. Y decimos que daba porque, desde el pasado mes de marzo, el proyecto ha tenido que cerrar tras múltiples denuncias.
La empresa prometía guardar tus datos biométricos del iris del ojo para crear “una economía global y más inclusiva”. Incluso prometían un “acceso más humano” alejado de los servicios financieros de la banca tradicional.
Prometía que la información se almacenaba en una cadena de bloques inmutable y segura y que jamás vendería ni compartiría los datos del iris a terceros sin el consentimiento del cliente.
¿Por qué cerró Worldcoin?
Pero todo lo anterior, parece ser, se quedó en promesas. De hecho, Worldcoin ha tenido que cerrar en España tras su prohibición por parte de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD).
Según la denuncia, se estaría violando la Ley de Protección de Datos por un mal almacenamiento y gestión de los patrones de iris. Sin olvidar que les acusan de “obtener el consentimiento de las personas de manera engañosa”. Esta tesis ha sido apoyada por la Audiencia Nacional.
Esta es la respuesta de la empresa: “Worldcoin cumple totalmente con todas las leyes y regulaciones que rigen la recopilación y transferencia de datos biométricos, incluido el Reglamento General de Protección de Datos de Europa (GDPR)”.
Sin mencionar que miles de personas se han quedado sin poder canjear las criptomonedas que les habían pagado en dinero real, en euros, en caso de los 400.000 clientes españoles.
Por todo ello, y tras el cierre cautelar de Worldcoin, los expertos en ciberseguridad no recomiendan que pensemos más de dos veces antes de acceder a un escaneo de iris. Nuestra privacidad y seguridad digital debe ser algo primordial.