Auroras boreales o arcoíris dobles son fenómenos meteorológicos más o menos conocidos, aunque muy difíciles de ver. Pero hay otros aún más raros, como un espectro de Brocken que, si nos los encontramos por casualidad, no sólo nos dejan alucinados sino también intrigados.
Eso es justo lo que me pasó hace unos años, volviendo de un viaje de trabajo en avión, cuando el aparato comenzó a descender para aterrizar y tuvo que atravesar las nubes. Al hacerlo, vislumbré por la ventana del avión la impactante imagen que ilustra el artículo y que inmortalicé con mi smartphone (que, por supuesto, tenía en modo Avión).
La foto me fascinó y por eso la publiqué en mi Instagram (que —por cierto— por entonces era una red social para aficionados a la fotografía) a pesar de que realmente no sabía qué era lo que había captado.
Algo más tarde, y casi por casualidad, me enteré de que se trataba de un efecto óptico que tiene similitudes con el arcoiris pero es mucho más raro y difícil de ver: un espectro de Brocken o efecto Broken.
¿Qué es un espectro de Brocken?
Se trata, como venimos diciendo, de un efecto óptico muy raro que se produce cuando el sol brilla detrás nuestro y proyecta sus rayos directamente sobre las nubes o la niebla (si se produce en tierra).
El fenómeno provoca que veamos una sombra nuestra (en mi caso del avión donde volaba) proyectada sobre las nubes o la niebla y rodeada de halos de luz de múltiples colores. Es decir, algo similar al arcoíris ya que, como éste, es un fenómeno óptico producido por la difracción de la luz solar a través de una nube de diminutas gotas de agua de tamaño uniforme.
El nombre proviene del pico Brocken, el más alto de los montes Harz (Alemania), un lugar donde se producen frecuentes nieblas y que tiene una leyenda alrededor de este fenómeno (ya que puede parecer que estás viendo a un gigante rodeado de un halo misterioso a lo lejos) desde que fuera observado y descrito por Johann Silberschlag en 1780.
Por eso, en aquella región también se le conoce como espectro de montaña haciendo referencia a la posibilidad de observar nuestra sombra agigantada al proyectarse sobre las nubes al otro lado del sol.
Algo que, en realidad, puede ocurrir en cualquier ladera de montaña neblinosa o donde haya un banco de nubes (también desde un avión como sucedió en mi caso). A pesar de eso, es un efecto muy raro de ver.
¿Cómo ver un espectro de Brocken?
Como os podéis imaginar, se trata de un fenómeno bastante imprevisible y muy difícil de observar. Ya ver una aurora boreal es algo complicado, pero al menos sabemos que viajando en determinadas épocas del año a ciertas zonas climatológicas con condiciones extremas (cerca de los polos terrestres) tendremos muchas posibilidades de conseguirlo.
En este caso quizá viajando a esa montaña de Alemania en otoño o invierno podríamos llegar a experimentarlo, pero aun así no creemos que fuera fácil encontrárselo.
Lo más parecido, no sólo por el efecto óptico en sí sino también por lo difícil que es ver, podría ser un arcoíris blanco, otro fenómeno sumamente raro e imprevisible.
También denominado arcoíris de niebla (Fog bow en inglés), se trata de una variante del arcoíris pero sin colores debido al tamaño de las gotas de agua que, cuando son muy pequeñas, no pueden reflejar los colores típicos y sólo emiten luz blanca.
Sea como fuere, el espectro de Brocken es un fenómeno imprevisible bastante desconocido que ahora conocemos un poco más. ¿Tenías la suerte de haberlo visto alguna vez como me pasó a mí?
Imágenes | Foto de portada de Oscar Condés. Resto de Wikipedia