Apple, Samsung y los bancos están empeñados en que paguemos sin dinero, desde el teléfono móvil. Pero, ¿es lo mismo pagar desde el teléfono que pagar con el teléfono? No, por supuesto. En este artículo vamos a ver en qué se diferencian y todos los métodos existentes actualmente.
Pagar con el móvil o desde el móvil
Como decíamos, no es lo mismo. Si pagamos «con» el móvil, lo haremos a través de la tecnología NFC, mientras que si pagamos «desde» el móvil lo haremos utilizando aplicaciones instaladas en el smartphone. En ambos casos, de lo que disponemos es de un monedero virtual que, una vez cargado de dinero, nos permitirá realizar transacciones de compra, venta e incluso de traspaso de dinero a conocidos.
La idea es que, ya que todos llevamos encima todo el día nuestro smartphone, lo utilicemos como dinero sin necesidad de llevar la cartera o de sacar la billetera. Ni siquiera tendremos que memorizar una contraseña, ya que, mediante NFC o incluso mediante huella dactilar, podremos dar orden a nuestro teléfono de que realice el pago.
Diferentes sistemas para un mismo objetivo
Si bien es cierto que esta tecnología lleva varios años funcionando, sobre todo en países como EE UU, en España vamos familiarizándonos poco a poco con este sistema. Según datos de MasterCard, durante 2015 se han triplicado las transacciones hechas mediante tecnología sin contacto. El número de tarjetas contactless emitidas por las entidades financieras españolas durante el último trimestre de 2015 ha aumentado un 68%, mientras que los terminales de punto de venta (TPV) de comercios españoles lo ha hecho en un 32%.
Más datos: 1 de cada 5 españoles ya realiza pagos con el móvil, bien sea a través de aplicaciones o acercando el dispositivo a un terminal físico en tienda (cifras extraídas de la última edición del Barómetro de Tarjetas de MasterCard).
Pero, ¿es seguro pagar mediante el móvil?
Pues todos los interesados afirman tajantemente que sí es seguro, al menos tan seguro como son las tarjetas de débito y crédito. Todas las transacciones van encriptadas y, en la mayoría de los casos, las claves o números de tarjeta ni siquiera se almacenan en el smartphone.
Por otro lado, como veremos, son varios los sistemas que utilizan nuestra huella dactilar como forma de confirmar el pago, con toda la seguridad que ello implica. Cada vez son más los smartphones que incluyen un sensor de huellas y esta tecnología es cada vez más popular e indiscutiblemente segura.
Sistemas de pago de fabricantes
Las grandes empresas tecnológicas hace tiempo que presentaron sus propuestas, bajo denominaciones como Apple Pay, Samsung Pay o Android Pay, pero es que también las grandes entidades financieras e incluso las operadoras de telecomunicaciones quieren ser parte del que promete ser el próximo negocio tecnológico.
La gran ventaja de que los mismos fabricantes implementen sus propios servicios de pago es que ya vienen integrados en el dispositivo. Claro que esto es también su gran hándicap, porque condiciona el uso a una marca o sistema operativo.
Google renovó su Wallet y lo ha llamado Android Pay, aunque por ahora solo está disponible en EE UU. Samsung lleva unos años empeñado en imponer su Samsung Pay, que, realmente, tiene varios beneficios: es compatible con lectores de bandas magnéticas (lo que hace posible que soporte terminales algo antiguos que no estén adaptados a NFC) y es seguro y rápido (utiliza nuestra huella dactilar). Apple Pay, por su parte, quiere facilitar las cosas a los usuarios de iOS mediante tecnología sin contacto. Tanto con Samsung como con Apple incluso podremos pagar con el smartwatch si así lo deseamos.
Pagar mediante nuestra operadora
Movistar, Orange y Vodafone tampoco han querido quedarse a un lado y utilizan la tecnología NFC para pagar. En algunos casos, necesitaremos de una SIM especialmente adaptada, pero ya se están realizando pruebas en los transportes de algunas ciudades y se prevé que durante este 2016 se extiendan progresivamente sus respectivas propuestas.
Por ejemplo, para que los usuarios de Orange pueden disfrutar de esta nueva forma de pago, precisarán un móvil NFC, una tarjeta SIM NFC, la aplicación Orange NFC (disponible en Google Play) y la aplicación propia de los proveedores de servicios que ya estén trabajando con Orange.
Bancos y sus aplicaciones
CaixaBank ha presentado recientemente un sistema nuevo al que llama ImaginBank, un banco que sólo funciona a través del móvil, sin oficinas físicas, si no a través de una app y que ofrece soporte para wearables (podemos solicitar una pulsera que funciona como tarjeta contactless) o smartwatches (Android e iOS).
Este ImaginBank no tiene comisiones e incluye una cuenta corriente y una tarjeta física de débito. Soporta pago por contacto y, mediante una app especialmente desarrollada para Facebook, podremos consultar nuestros movimientos.
Este sistema de CaixaBank permite la retirada de ingresos mediante un mensaje SMS (la app genera un código de autentificación que deberemos introducir en el cajero automático). Incluso si nuestro smartphone no dispone de NFC, se nos facilitará una pegatina Visa contactless que, adherida al móvil, nos permitirá realizar los pagos.
Además de CaixaBank son muchas las entidades que poseen su propio sistema de pagos: Bankinter pagos, BBVA Wallet, etc.
Sistemas generales
El gran problema es la falta de un estándar generalizado que permita al usuario utilizar libremente este servicio, independientemente de marcas o bancos. Una solución son las aplicaciones y plataformas independientes como la conocida PayPal (que también dispone de pegatinas para pagar sin contacto) o CashCloud, una cartera electrónica que nos permite pagar a través del móvil (mediante NFC o pegatina), enviar dinero a nuestros contactos y, además, ganar «cashcredits» que podremos cambiar por dinero real. Cashcloud también dispone de tarjeta física (de MasterCard) cuyos movimientos podremos controlar mediante la app que instalaremos en nuestro smartphone (iOS o Android).
Estos son los métodos de pago que existen actualmente, cada vez más seguros y cómodos para los usuarios. Todo parece indicar que, dentro de poco tiempo, será una realidad el que no necesitemos llevar dinero encima.
En Anexo M | ¿Son seguros los pagos a través de NFC?
Imágenes | Capital.com