Las tropas estadounidenses desplegadas en Afganistán empezarán a utilizar pequeños drones que caben en la palma de una mano.
En Nobbot ya hemos hablado del uso humanitario de drones que, en algunas zonas de África, se están utilizando para enviar medicinas en situaciones de urgencia. También hemos comentado cómo pueden ayudar a salvar a los elefantes o ayudar a sofocar incendios. Sin embargo, la máquina es lo que el hombre hace con la máquina y, en esta ocasión, hablamos de usos bélicos de los drones.
drones minúsculos para las tropas estadounidenses
Los dispositivos son extremadamente ligeros, casi silenciosos y tienen una autonomía de vuelo de hasta 25 minutos. El dron, que pesa menos de 60 gramos, se puede desplegar en menos de un minuto y tiene un alcance de más casi dos kilómetros. Su uso permitirá eliminar los puntos ciegos del campo de batalla con el objetivo de salvar las vidas de las tropas y «evitar daños o muertes no intencionales». Los comandos inalámbricos y los datos enviados entre el avión no tripulado y su controlador están cifrados para protegerlos contra la piratería.
«Si te estás disparando desde áreas que no puedes ver, puedes usar este sistema antes de moverte a la línea de fuego», explica Kristian Molander de FLIR Systems, que ha fabricado estos helicópteros de bolsillo. La configuración básica de este sistema, llamado Black Hornet, incluye un dron para el día y otro para la noche, una estación base que se conecta a un controlador portátil y una pantalla del tamaño de una tablet.
John Paul Kruszewski, Ingeniero para los sistemas no tripulados en el Centro de Soldados del Comando de Desarrollo de Capacidades de Combate del Ejército de los EE.UU., compara estos helicópteros de bolsillo con unos prismáticos voladores. «Al usar este sistema, los soldados pueden entender mejor su entorno operacional para que puedan tomar mejores decisiones y tomar estas decisiones más rápido que nunca. Hace a los soldados más efectivos y reduce su riesgo táctico».
drones controlados por la mente
El ejército estadounidense está siendo especialmente activo a la hora de explorar el uso de drones en situaciones de guerra. Tal como publicamos en Nobbot, incluso quiere controlar un ejército de drones con el pensamiento, enviando órdenes que se transmitan en pocos milisegundos. Por lo menos, este es uno de los objetivos que se ha planteado la Agencia estadounidense de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa (DARPA) en su nuevo programa de neurotecnología.
Estos nuevos interfaces cerebrales bidireccionales de alta resolución no precisan de cirugía y podrían, por ejemplo, habilitar diversas aplicaciones de seguridad nacional, como el control de sistemas de defensa cibernética activa, controlar vehículos aéreos no tripulados, o coordinar diversos equipos informáticos para realizar tareas durante misiones complejas.