Raúl Torres y Raúl Verdú decidieron apostar por su sueño poco después de terminar sus estudios de ingeniería. Sin experiencia previa y en un contexto poco favorable, construyeron un pequeño cohete espacial para poner mini satélites en órbita. Se trataba de un proyecto caro y arriesgado, pues en España no suelen impulsarse este tipo de iniciativas.
Así, en 2011 crearon PLD Space, una compañía de lanzadores espaciales ‘low cost’ para los mercados suborbitales y orbitales. En poco tiempo dieron forma a una startup pionera en Europa, pues nació en una diminuta sala de la Universidad Miguel Hernández de Elche y, en la actualidad, cuenta con 20 trabajadores y unas instalaciones de 3.000 m2, además de un banco de pruebas en el aeródromo de Teruel.
una startup española diseña pequeños impulsores espaciales
Con mucho esfuerzo, estos dos jóvenes ingenieros, su equipo y las empresas que los han apoyado, PLD Space ha entrado en el mercado de satélites espaciales que tanto ha evolucionado en los últimos años. Una de las principales tendencias del sector se basa en la miniaturización de la electrónica, por lo que hoy en día se diseñan satélites que pueden cambiar incluso en la palma de la mano.
No obstante, los cohetes que envían esos cohetes hasta el espacio aún mantienen tamaños gigantescos. La startup española vislumbró en esta debilidad como una oportunidad en el mercado espacial y ya se han convertido en la primera empresa europea que trabaja con propulsión líquida para el lanzamiento de satélites.
primer caso de éxito
El primer paso era el más difícil: conseguir financiación, pero el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CEDETI) les ofreció 250.000 euros con la condición de conseguir por sus medios otros 750.000 euros. Como era de esperar, lo lograron; su proyecto convenció a muchos pequeños inversores privados. Con este primer millón de euros, empezaron a desarrollar su tecnología de propulsión líquida de queroseno más oxígeno líquido (kerolox), una tecnología que nunca antes se había hecho en España y que sólo habían desarrollado gigantes como Airbus y Rolls Royce, tal como ha publicado NCYT. Al mismo tiempo tenían que desarrollar las instalaciones para probar esos motores de combustión líquida e instalaron un banco de pruebas en el aeródromo de Teruel.
pld space trabaja con propulsión líquida
La startup española PLD Space se ha convertido así, partiendo de cero, en la primera startup en Europa que trabaja con propulsión líquida para lanzar satélites al espacio. Un sistema muy complejo que combina oxígeno líquido a 185 grados bajo cero y queroseno a temperatura ambiente.
Su gran desafío comenzó con el proyecto LPSR (Liquid Propulsion Space Recovery), lo que suponía el lanzamiento de un cohete al espacio, su recuperación y reutilización. En Europa, sólo existía know how en cohetes con combustible sólido, de modo que una vez más PLD Space es la pionera.
próximos pasos
En 2017, desarrollaron un microcohete con una capacidad de carga de unos 100 kilos, que volará hasta los 250 kilómetros de altura para probar tecnología en condiciones espaciales y, una vez cumplida su misión, regresará a la Tierra. Su lanzamiento está previsto para marzo de 2019 y será el primer cohete europeo reutilizable.
Después llegará el Arion 2, que será el primer lanzador europeo en poner en órbita pequeños satélites (hasta 250 kg de carga, a una altura de 500 km). Un verdadero hito en la industria espacial del viejo continente. Sin know how previo, sólo cabían dos posibilidades: ensayo-error (muy costoso, prolongado e incluso peligroso), o simulación. Eligieron la segunda opción.
¿cómo viajaremos al espacio en el futuro?
Para los fundadores de PLD Space el futuro de la industria espacial seguirá en manos de Estados Unidos, sin perder de vista a China, que en 2011 lanzó su primera estación espacial; el turismo espacial será una realidad, aunque hasta 2040 no es probable que el hombre llegue a Marte; Europa lanzará en 2020 la lanzadera espacial Ariane 6, de tipo mediano pesado (70 metros), un cohete de combustible líquido con cohetes aceleradores sólidos; y el mercado de micro lanzadores seguirá creciendo a un ritmo vertiginoso y esta startup española podría convertirse en la protagonista europea de esta tendencia.