Marta Herraiz es codirectora general de REDI, la Red Empresarial por la Diversidad e Inclusión LGBTI en España, y fundadora de LesWorking, la primera red profesional internacional para mujeres lesbianas.
Top100 Mujeres Líderes de España y está considerada por algunos medios como una de las personas LGBTI y como una de las mujeres más influyentes de nuestro país. Hablamos con ella sobre la situación del colectivo LGBTI en el mundo empresarial.
Es doble licenciada en Derecho y Empresas por la Universidad Carlos III y MBA por el Instituto de Empresa, y trabajó durante más de 10 años en consultoría estratégica y de negocio para empresas multinacionales. Ha sido seleccionada como una de las– ¿Qué es REDI?
REDI es la red empresarial por la diversidad e inclusión LGBTI, una asociación sin ánimo de lucro creada en 2018 y actualmente formada por más de 100 empresas, de todos los sectores y tamaños, que promueven espacios de trabajo inclusivos para todas las personas independientemente de su orientación sexual, identidad o expresión de género.
– ¿Cuáles son las cuestiones prioritarias que hay que afrontar en el ámbito empresarial en términos de diversidad?
Aunque España cuenta con una de las legislaciones más avanzadas e inclusivas de Europa en cuanto a derechos civiles, no podemos olvidar que, en el día a día, las personas LGBTI siguen afrontando situaciones discriminatorias a la hora de acceder a un puesto de trabajo o en el ejercicio del mismo.
Es por ello que «normalizar» la diversidad, haciendo cotidiana la realidad de las personas LGBTI empleadas en nuestras asociadas y sensibilizando en los beneficios de la inclusión en el ámbito empresarial, es una prioridad para REDI.
El 86% de las personas LGBTI ha soportado comentarios o chistes homófobos o rumores sobre su orientación sexual o identidad de género en sus lugares de trabajo, por lo que apenas el 40% se atreve a ser visibles dentro de sus organizaciones. En REDI trabajamos de manera continua acompañando a las empresas con asesoría, talleres y charlas de sensibilización sobre diversidad e inclusión.
Con esto ayudamos a que las personas LGBTI que trabajan en nuestras asociadas puedan desarrollar su carrera en un contexto seguro, sin miedo a prejuicios o estereotipos. Pero también ayudamos al resto de personas a comprender una realidad de la que a menudo no tienen referentes cercanos. Todo ello se traduce en una mayor productividad, mantener el mejor talento y ofrecer soluciones de negocio más innovadoras.
«Las personas LGBTI siguen afrontando situaciones discriminatorias a la hora de acceder a un puesto de trabajo o en el ejercicio del mismo».
– ¿Qué avances se han conseguido en los últimos años?
El número de nuestras empresas asociadas no deja de crecer y los servicios que ofrecemos desde REDI son cada vez más demandados. Trabajamos con empresas de todos los ámbitos. En algunos de ellos era impensable hasta hace pocos años que se trabajara la diversidad LGBTI de la manera en la que lo están haciendo ahora.
En todas nuestras empresas asociadas hemos visto un impacto significativo en la cultura corporativa y en la mejora del ambiente de trabajo, permitiendo que cada persona empleada pueda ser ella misma y aportar su diversidad sin miedo a repercusiones negativas. Aunque quede mucho por hacer, cada día mejoramos en términos de visibilidad y de trabajo por la inclusión en el contexto laboral.
– La sociedad española es una de las más avanzadas en lo que se refiere a reconocimiento del colectivo LGTBI, ¿eso tiene reflejo en las empresas?
Mientras más abierta es una sociedad, menos trabajo les cuesta a las personas LGBTI ser visibles, sobre todo si en su puesto de trabajo sienten que tienen el respaldo y apoyo explícito del que antes carecían. Cada vez más empresas se asocian a REDI conscientes de una realidad que antes se obviaba, cuando no se negaba, pues la orientación sexual y la identidad género se consideraban parcelas privadas de las que no se podía hablar con naturalidad en la oficina.
Al ser el mundo empresarial un reflejo de la sociedad donde opera, las empresas conocen la importancia de crear espacios de trabajo seguros e inclusivos y fomentar políticas de integración, pues no solo crean reputación a nivel corporativo, sino que las personas LGBTI que se sienten seguras en sus puestos de trabajo son más productivas y sufren menos situaciones de estrés derivadas de la preocupación por ser discriminadas o estereotipadas.
«Existen todavía muy pocos referentes LGBTI abiertamente visibles dentro de la alta dirección de las empresas».
– ¿Detectáis un compromiso real de la alta dirección de las empresas en esta cuestión?
Afortunadamente cada vez más cargos directivos desean que las personas que forman parte de sus empresas posean una formación correcta en inclusión y diversidad, aunque existen todavía muy pocos referentes LGBTI abiertamente visibles dentro de la alta dirección de las empresas, especialmente mujeres. En REDI observamos que el interés va en aumento y eso se refleja en los números de nuestras asociadas: Las empresas con las que trabajamos ejecutan, con el soporte de REDI, planes reales de inclusión LGBTI que repercuten, no solo en su reputación corporativa y en la atracción y retención del mejor talento, sino en sus resultados de negocio.
– ¿Sigue dando miedo salir del armario en el entorno profesional?
Las personas LGTBI suelen ser más visibles fuera del entorno laboral, por ello es más común el caso de personas fuera del armario con sus familias o amistades que en sus trabajos, puesto que se arriesgan a la discriminación o rechazo por parte de sus compañeros o superiores y ese factor es determinante. Dedicamos muchas horas a nuestra jornada laboral y no poder expresarnos con naturalidad tiene consecuencias nefastas en la autoestima y calidad de vida de muchas personas. Sí es cierto que la visibilidad de la diversidad LGBTI ha crecido mucho estos últimos años pero, a día de hoy, para muchas personas el entorno laboral supone abandonar su propia realidad personal para evitar posibles problemas. Trabajar en una empresa con una política propia de inclusión LGTBI puede suponer un salto enorme en la calidad de vida. Y aquí nos referimos directamente al colectivo LGBTI, pero también, indirectamente, a las personas “aliadas” que son padres, madres, hermanos, etc. de una persona LGBTI y que, de alguna manera, también pueden sufrir este tipo de armarios en las empresas.
«Para muchas personas el entorno laboral supone abandonar su propia realidad personal para evitar posibles problemas».
– En tu experiencia personal, ¿has sufrido algún episodio de discriminación por tu condición sexual?
Más que discriminación explícita, sufrí la ausencia absoluta de referentes de mujeres lesbianas visibles, tanto en mi día a día como en los medios de comunicación o en las empresas, lo que considero que retrasó mucho mi proceso de reconocimiento como lesbiana y de autoaceptación. Esto me llevó a salir del armario quizá un poco tarde, por lo que decidí crear yo misma espacios de trabajo y referentes para que las personas LGTBI pudiésemos trabajar para revertir esa situación. De ahí nació LesWorking y mi trabajo en REDI.
– Por último, ¿cuál es tu opinión sobre la llamada “ley trans”, cuyo trámite no salió adelante en el Congreso?
En REDI nos ceñimos únicamente al ámbito laboral, donde la realidad de las personas trans es especialmente dura. Casi el 80% de las personas trans se encuentran desempleadas o en riesgo de exclusión. Por ello, hemos creado una estrategia conjuntamente con nuestras empresas para incentivar la inclusión sociolaboral de las personas trans, acercando su realidad y creando notoriedad de sus oportunidades de inclusión entre nuestras empresas, e incentivando su contratación mediante campañas, eventos corporativos y talleres. Mientras a otros niveles se debaten estos temas, nosotros esperamos realmente incidir en una mejora de la aceptación e inclusión de este colectivo tan vulnerable en las empresas.