El proyecto 100Photos, de la revista TIME, reúne las 100 fotografías más influyentes jamás tomadas según esta publicación y un equipo internacional de expertos. La contemplación de estas instantáneas, en estos tiempos es los que cualquiera tiene acceso a una cámara de gran calidad gracias a su smartphone, sirve para recordarnos que la fotografía, más que de la tecnología y de Instagram y sus filtros, depende de la capacidad de observación, sensibilidad e inteligencia del ojo humano.
Los responsables de la iniciativa 100Photos, Ben Goldberger, Paul Moakley and Kira Pollack nos recuerdan que, «aunque la fotografía es un medio mucho más joven que la pintura -la primera foto se tomó en 1826- los asombrosos avances tecnológicos vividos desde entonces hacen que, cada día, se tomen más fotografías que lienzos hay en todas las galerías y museos del mundo». Sólo en 2016 se hicieron cientos de miles de millones de imágenes.
Su trabajo ha sido extenuante porque, además de seleccionar las imágenes junto a los editores y reporteros de TIME, los impulsores de 100Photos entrevistaron a los fotógrafos, a sus amigos y familiares y cualquier persona que pudiera aportar más información sobre las claves que daban sentido a cada una de las fotografías. Gracias a esta investigación podemos contemplar también videos cortos que nos ayudan a comprender mejor a cada fotógrafo y su obra.
100Photos y la imagen influyente
Según reconocen Goldberger, Moakley y Pollack no hay una fórmula mágica que haga que una imagen sea influyente, «algunas están en la lista de 100Photos por su excelencia y otras porque han contribuido a moldear nuestro pensamiento o la forma en la que vivimos».
Los expertos, sin embargo, detectan una constante en todas la imágenes: el fotógrafo se convierte en testigo que da testimonio del mundo a través de sus instantáneas, tal como hicieron Alexander Gardner en la batalla de Antietam, en 1862; o David Guttenfelder, el primer fotógrafo profesional que subió una imagen de Corea del Norte a Instagram, en 2013. James Nachtwey lo explicó bien: «sigues adelante, sigues enviando las fotos, porque ellas pueden crear un entorno donde el cambio sea posible».