De la misma manera que el desarrollo tecnológico ha conseguido modificar otros ámbitos de nuestra vida, también ha revolucionado la forma con la que nos comunicamos e interactuamos con nuestros semejantes. Un contexto en el que apps y comunidades virtuales como Facebook, Twitter e Instagram han cobrado especial importancia. Sin embargo, existe vida más allá de ellas. En concreto, nos estamos refiriendo a aquellas comunidades pensadas para compartir no solo cualquier tipo de mensaje, sino también asuntos más específicos, desde el amor por los gatos, hasta la pasión por el crochet, pasando por la más oscura de las filias. Son redes sociales para frikis que tienen su particular espacio en Internet –sí, incluso las de dudoso gusto-. Estas son las que han llamado nuestra atención.
redes sociales para frikis de los animales
Para empezar y dado que los vídeos de gatitos son los más vistos de Internet, nos centraremos en aquellas redes sociales enfocadas a los frikis de las mascotas. Y aunque el abanico de opciones es tremendamente amplio, nos quedamos con Tag a cat, Webanimales, Wuowi, y Tickkle. Pero vayamos por partes.
Como su propio nombre indica, esta primera hará las delicias de cualquier loco de los mininos; una app de interfaz intuitiva en la que es posible compartir fotografías, buscar las de otros felinos, seguir a nuestros favoritos, conocer a otros dueños e interactuar con ellos, y hasta etiquetarlos en un mapa. De hecho, es a esta última característica a la que debe su nombre.
Wuowi hace lo propio con los perros –se trata de una comunidad generalista aunque cuenta con más usuarios propietarios de canes-. Su sistema de geolocalización está enfocado para que estos puedan relacionarse con otros dueños con ejemplares similares. Es decir, para el cruce de razas, por ejemplo. Tiene algunas herramientas de publicación y comentarios similares a las de Zuckerberg.
Webanimales, por su parte, excede el mero hecho de compartir e incluye información que puede resultar de utilidad sobre razas, consejos veterinarios y artículos especializados. Además, es una de estas redes sociales para frikis más variadas, pues aquí tienen cabida hasta hurones, serpientes, tortugas y otras mascotas exóticas.
En cuanto a Tickkle, puede considerarse como el Instagram e incluso como el Tinder de las mascotas. De hecho, se centra en las imágenes y hasta cuenta con un sistema de voz que nos permite pasar de una captura con tan solo decir “next”. Sí, como en el programa de televisión y con idéntico fin. Además –y aunque a priori puede resultar algo incómodo- cada una de las fotos que se sube a la plataforma es revisada por sus administradores, un proceso tedioso que, no obstante, garantiza que no nos encontremos con “sorpresas”.
Para “odiadores profesionales”
Otras de las redes sociales para frikis que han llamado nuestra atención han sido Cloak y Hatebook, enfocadas a “odiadores profesionales”. Para que nos entendamos, la primera se describe a sí misma como la “red social antisocial” y se basa en un principio muy sencillo: el de que podamos evitar contactos indeseables.
Lo hace posible sincronizándose con nuestros “amigos” de Facebook, Twitter, Instagram y Foursquare, a los que logra geolocalizar en un mapa con el fin de que podamos alejarnos de ellos. Dispone de un sistema de alertas que nos avisa si nos estamos acercando a un radio de aproximación peligroso.
El planteamiento de Hatebook es similar: una utilidad antisocial que nos desconecta de lo que odiamos, y nos incita a publicar secretos, encontrar cotilleos de nuestros amigos y enemigos, subir mentiras, crear un clan odiador, etcétera. Todo con un planteamiento en clave de broma en el que apunta que todo el mundo adora odiar y que “los enemigos de tus enemigos son tus amigos”.
Para encontrar esa “pareja especial”
Por supuesto, no faltan las redes sociales para encontrar a nuestra media naranja. Un punto en el que resulta imprescindible mencionar algunas alternativas a Tinder y Meetic muy particulares. Es el caso de FarmersOnly -al más puro estilo de Granjero busca esposa-; y de Meet at the Airport –una comunidad de citas para que aquellos con una vida ocupada “encuentren el amor” (o al menos, algo de sexo) entre vuelo y vuelo-.
Existe hasta una para hallarla entre rejas. Se trata de PrisionInMates, en la que presidiarios de distintas cárceles tienen la opción de relacionarse con otros reclusos e incluso con personas del exterior. Una suerte de refugio que trata de fomentar la positividad y de ayudarles. Además, se presenta como una especie de evolución del típico carteo. Está enfocada para usuarios estadounidenses y se organiza por estados.
Incluso los feos, los que llevan bigote y los que exceden los centímetros habituales tienen las suyas para encontrar parejas “a su altura”. Nos estamos refiriendo a Stache Passions, The Ugly Bull Ball y TallFriends, respectivamente. Respecto a la segunda, cabe destacar su carácter divertido, un lugar que trata de reunir a gente sin complejos y “de apariencia normal”, según apuntan, perfecta para los que quieren ahorrarse el típico selfie con morros de pato en el cuarto de baño.
redes sociales para frikis de lo paranormal
Otra de las redes sociales para frikis es REMCloud, cuyos miembros comparten la curiosidad por los sueños, en concreto por interpretarlos. Algo muy específico que, si bien se contempla en algunas corrientes del psicoanálisis, se hace de manera generalista y sin ningún tipo de rigor.
En Psychic Faces, asimismo, no solo se comparten cuestiones relacionadas con lo paranormal, sino que aquí tienen cabida las personas que aseguran tener poderes psíquicos, desde adivinos hasta chamanes y curanderos. Encontramos bendiciones, trucos para acabar con el mal de ojo y un sinfín de vídeos e imágenes de lo más curiosas.
Para los amantes de la bebida
Cuando hablamos de los amantes de la bebida, nos estamos refiriendo a aquellas comunidades que fomentan las relaciones en estado de embriaguez y también a otras cuyos miembros son aficionados al vino y la cerveza. Livr, por ejemplo, es tan exclusiva, que no nos permite entrar si no estamos borrachos; algo que comprueba mediante un “portero biométrico”; un alcoholímetro que se engancha al móvil. Untappd es similar.
Vivino, por su parte, está dedicada a los apasionados por el vino, mientras que Brewminer es perfecta para los bebedores del líquido dorado. En cuanto a esta última, llama la atención su interfaz y funcionamiento, muy cuidado y centrado en compartir fotografías y opiniones de cervezas exclusivas.
Otras redes sociales rarunas
Los amantes del crochet y el amigurimi (en definitiva, los que adoran tejer), encontrarán su lugar en Raverly, una comunidad de aspecto y funcionamiento parecido al de Pinterest y específica para esta afición. Aquí es posible compartir fotos, proyectos e ideas, pero también vender los distintos objetos elaborados e esta manera y hallar patrones. Estos cuentan, de hecho, con un buscador específico.
Excesivamente bizarra es Diapermates. Para aquellos que desconozcan la filia que le da nombre –también conocida como autonepiofilia-, se trata de una red social “exclusiva” para aquellos adultos que disfrutan llevando pañales. Un mundillo que tiene connotaciones sexuales y escatológicas y un lugar en el que se publican fotografías y vídeos, se interactúa con otros “aficionados”, etcétera. No apta para mentes impresionables.
Para acabar, no podíamos dejar de mencionar a Dronestagram, sí una suerte de Instagram para drones que nació a finales de 2014 y en la que hallamos imágenes tomadas desde estos dispositivos. Un lugar que hará las delicias de cualquier amante de la fotografía y que cuenta con capturas muy curiosas.
Imagen | Pixabay
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