No gustan los datos porque nos permiten compartir las fotografías de nuestras comilonas en Instagram o ese meme tan gracioso visto en WhatsApp, también ver una película o escuchar música en nuestra plataforma de streaming favorita. No es de extrañar, por tanto, que desde 2010 hasta 2017, el tráfico de datos de banda ancha móvil haya pasado de 64.300 a 1.054.007 Terabytes. Hoy, el 4G tiene cobertura en prácticamente toda España y se empieza a hablar del 5G como la próxima revolución de la industria y del uso de las telecomunicaciones. Así que el consumo de datos, lejos de ralentizarse, seguirá disparándose y, por ello, operadoras de telecomunicaciones como Orange siguen aumentando los gigas de sus tarifas para adaptarse a las necesidades de sus clientes, en este caso sin aumento de precio.
Las mejores quedarán, por tanto, configuradas de la siguiente forma:
- Go Top pasa de 25 a 40GB (convirtiéndose así en la tarifa con más GB del mercado), por 47,95€/mes. Incluye Multisim (a 0 €/mes con un coste de activación de 5€) para poder usar también los GB incluidos en la tarifa en otro dispositivo.
- Go Up pasa de 12 a 20GB, también con MultiSim incluida, todo por 35,95€/mes.
- Go On pasa de 7 a 10GB, por 29,95€/mes.
Las tres tarifas incluyen llamadas ilimitadas a destinos nacionales durante las 24h –sin establecimiento de llamada- y roaming en la Unión Europea. Y, si el cliente se lleva un terminal a plazos con Orange, además de no pagar intereses, disfrutará de muchos más GB en su tarifa durante 24 meses:
- Go Top: 8 GB más (48GB cada mes)
- Go Up: 8 GB más (28GB cada mes)
- Go On: 4 GB más (14GB cada mes)
podemos controlar el consumo de datos
Y si aún no tenéis suficiente con estos datos, en Nobbot ya os explicamos que hay opciones para conocer cómo y cuándo consumimos datos, y establecer políticas de restricción de consumo o alertas para llevar un seguimiento al día y evitar que nos quedemos sin gigas a mitad de mes. Cuestiones básicas como no usar el punto de acceso WiFi más allá de lo necesario o utilizar aplicaciones que nos permitan consumir menos datos (la descarga de mapas de navegación offline, por ejemplo), son también importantes.
En general, el consumo de datos de los servicios actuales cada vez es mayor. Un ejemplo sencillo: el servicio proporcionado por Netflix para consumo de series/películas es capaz de entregar el contenido en Full HD (1080p) con un bitrate de entre 3,5-5 Mbps; si un usuario actualiza su TV a un nuevo modelo 4K y el contenido está disponible para dicha resolución entonces ese mismo usuario pasa a consumir un bitrate de 15,3 Mbps (25 Mbps recomendado por Netflix).
Así pues, las redes de los operadores tienen que estar preparadas para una evolución, tanto del volumen de datos (los Bytes o elementos de información) como del tráfico de la red (el número de bits por segundo), cuyas previsiones para los próximos años son de continuo crecimiento, alcanzando los 3,3 ZettaBytes por año y un crecimiento que se multiplicará por tres en los próximos 5 años