Se pregunta y se contesta el periodista Ignacio del Castillo sobre esta espinosa cuestión, en un artículo del que seleccionamos algunos extractos al mismo tiempo que recomendamos su lectura íntegra. Una vez más, se demuestra que la realidad es compleja y sólo se puede llegar a entender mediante la información apoyada en datos. Así, frente al entusiasmo general con el que se ha acogido la decisión europea de acabar con los sobrecostes asociados al «roaming», el periodista hace una pausa y analiza lo que se esconde tras los titulares que se comparten por las redes a velocidad vertiginosa. ¿No estará enmascarando el roaming gratis una transferencia de rentas de pobres a ricos? Lean y después se invito a que reflexionen sobre la necesidad del periodismo en medio de la avalancha cotidiana de tuits.
Según Ignacio del Castillo, «la llegada de roaming gratis, o más bien del RLAH (roaming como en casa según la terminología acuñada por Bruselas), parece el Bálsamo de Fierabrás, que era bueno para todo, pero la realidad es que la distorsión del mercado que va a provocar -respecto a la situación actual- puede tener consecuencias negativas para los usuarios de móvil en España».
elementos inquietantes
Así, el periodista de Expansión enumera tres elementos inquietantes en los que apoya su argumentación:
- España es un país muy turístico. Recibe muchos más turistas que los que exporta, como aseguran todas las estadísticas. Además, los españoles viajamos muy poco en comparación con nuestros colegas europeos y usamos poco el roaming. Ese desequilibrio hace que los extranjeros consuman en España muchos más minutos de voz y megas de datos que los españoles en el exterior. Según el último informe de la CNMC, el regulador del sector, sobre este tema, esa asimetría suponía que en 2014 los extranjeros consumían 7,3 veces más datos en España que los españoles en Europa.
- La CNMC cree que la llegada del RLAH hará explotar el tráfico en roaming, al desaparecer el desincentivo actual de los altos precios.
- El coste real para los operadores españoles por el tráfico de datos en roaming que usan los turistas extranjeros, va a situarse por encima del precio mayorista que se va a fijar por parte de Bruselas. Es decir, el precio por megabyte que van a pagar los operadores extranjeros a las telecos españolas por lo que consuman sus clientes en España estará por debajo de lo que a los operadores españoles les cuesta producir cada megabyte.
roaming gratis y transferencia de rentas
Teniendo estos factores en cuenta, Ignacio del Castillo llega a la preocupante conclusión de que «el ansia acrítica por el «roaming gratis» en España sólo puede estar basada en una descomunal falta de información de la opinión pública ante sus efectos previsibles».
En su opinión, esta medida consensuada por el Consejo Europeo, la Comisión Europea y el Europarlamento, desencadenará una transferencias de rentas, del sur pobre al norte rico de Europa. «Eso significa que los clientes españoles, en la práctica, van a pagar más para que los extranjeros paguen menos, o sea, que van a estar subvencionando con sus subidas de precios nacionales el tráfico creciente de los turistas que lleguen a España, o lo que es lo mismo, que se producirá una doble transferencia de rentas en las que los más pobres subvencionarán a los más ricos».
Además, el periodista de Expansión señala una segunda transferencia de renta: «ya que los que menos viajan al extranjero de vacaciones, como pensionistas, inmigrantes y, en general, la población con menos rentas, verán sus precios subir a cambio de que los que viajan, que generalmente tienen rentas mayores, logren precios más baratos en sus conexiones en el exterior».
Nueva propuesta de bruselas
De nuevo, recomendamos la lectura el artículo para que cada cual, basándose en la información, llegue a sus propias conclusiones. Y, para completar los datos, recordamos que la última propuesta de Bruselas, establece que «no habrá un límite de días» aunque deja la puerta abierta a «que los operadores puedan intervenir si detectan abusos» no ligados a viajes periódicos.
Los criterios para determinar estos «abusos» serán la detección de un tráfico doméstico insignificante en comparación con el de «roaming» o el uso de varias SIM por el mismo cliente mientras está en itinerancia y la inactividad larga de una SIM asociada al uso casi exclusivo fuera del país de residencia.
En caso de desacuerdo entre el cliente y el operador, argumenta la Comisión, la teleco tendrá que poner a disposición cauces para que los usuarios presenten reclamaciones por esos cobros para cubrir «abusos». Si la disputa persiste, será el regulador nacional, en España la CNMC, quien tenga que resolver el caso.
La Comisión asume que esta propuesta es más complicada y aunque buena parte del control será casi automático, puede generar cargas burocráticas a las operadoras y muchas quejas entre los usuarios, que pueden acabar en miles de disputas ante los reguladores.
Un lío.