Mucha gente que lleva dos móviles encima, uno del trabajo y otro personal, podría evitarlo y cargar un solo aparato.
El Dual SIM es una buena opción para los profesionales con dos móviles porque libera espacio en sus bolsillos y evita el dolor de cabeza de mantener dos baterías con carga. Además, no tenemos que estar pendientes de dónde dejamos cada aparato, y también ahorramos en cables y cargadores. En fin, que la vida es más fácil si tenemos que lidiar con un solo teléfono.
Por otra parte, un teléfono Dual SIM permite hacer la desconexión del trabajo cuando estamos en familia o con los amigos, y viceversa. También es una opción muy conveniente cuando viajamos al extranjero, puesto que permite añadirle a nuestro teléfono habitual una tarjeta de un operador local del país de destino y evitar sorpresas en la factura del roaming, sobre todo cuando nos vamos fuera de la Unión Europea.
Configuración en Android
La configuración del Dual SIM en Android es muy sencilla. Lo primero es hacernos con un teléfono que dé esta opción, que está disponible en muchos modelos y no necesariamente en los de gama alta. A continuación introduciremos en las dos ranuras (o en una ranura doble) las dos tarjetas. En el apartado de ajustes tendremos que buscar “tarjetas SIM” y elegir la que vamos a usar para hacer llamadas, mandar SMS o bajarnos datos móviles. También podremos configurar con qué SIM recibiremos llamadas u optar por ambas para esta tarea.
Apple no ha optado en sus iPhone por el sistema Dual SIM. En su lugar, los teléfonos de la compañía de la manzana vienen provistos de una sola ranura, aunque pueden doblar línea gracias a la tecnología eSIM o SIM virtual. Es una opción que probablemente a largo plazo reemplace a las SIM físicas actuales y que integra la SIM, que en realidad es un chip, en el corazón del dispositivo.
Hay que recordar que la SIM virtual está siendo también la manera en que wearables como el Apple Watch o relojes inteligentes de Huawei y Samsung están disponiendo ahora de conectividad 4G o tendrán 5G en el futuro. Además, no conviene olvidar que hay algún truco para convertir el iPhone en un terminal Dual SIM, y es a través de pequeños adaptadores con cable o Bluetooth para conectar el teléfono a la tarjeta extra. No es muy estético, pero podremos ocultar la segunda SIM, que queda muy visible, escondiéndola por ejemplo debajo de la funda del teléfono o en un bolsillo.
Tres tipos de teléfonos Dual SIM
Volvemos al universo Android, el sistema operativo que cargan casi nueve de cada 10 móviles que se venden en el mundo. Y es para recordar que hay tres tipos de teléfonos disponibles con Dual SIM en el mercado. Es algo que debe tener en cuenta el usuario.
El primer tipo es el de los “teléfonos pasivos”, que tienen la limitación de que solo pueden tener cada vez una SIM activada para hacer llamadas y bajar datos. El segundo tipo es el de los aparatos dual standby, que son la mayoría de los que llegan a las tiendas actualmente. Estos pueden recepcionar llamadas de las dos tarjetas, pero cuando una recibe la comunicación, la otra entra en suspensión. Además, solo se puede usar una de las tarjetas para bajar datos.
Por último, el tercer tipo de smartphones Dual SIM (y que son los más avanzados) son los aparatos dual call. Estos permiten que nos llamen por ambas tarjetas, y nos darán la posibilidad de dejar en espera una de las llamadas. Estos modelos nos dirán de qué SIM procede cada llamada. Eso sí, se trata de un sistema que consume bastante batería y que, como los dos anteriores, solo mantiene activa una de las tarjetas para la bajada y subida de datos.
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