Cada vez se venden menos ordenadores personales, especialmente de sobremesa. Muchos factores han influido a la hora de iniciar y consolidar esta tendencia: equipos informáticos que cada vez aguantaban más años, una crisis económica que ha provocado que los ciclos de reemplazo de los sistemas se alargaran, irrupción y auge de la movilidad, equipos portátiles cada vez más potentes…Además, en muchas ocasiones, las tabletas están siendo el reemplazo natural de los PC. Y eso hace que se hable de la muerte del PC como concepto cada dos por tres, especialmente cada vez que aparece un nuevo modelo más orientado al público profesional, con nuevas prestaciones que podrían terminar de convencer a los usuarios de negocios.
Todo esto también ha provocado que la oferta de fabricantes de ordenadores personales sea también cada vez más reducida. E, incluso, debería serlo aún más, ya que la consultora Gartner considera que los jugadores de este mercado se enfrentan a una dura elección y deben decidir entre revisar sus negocios o abandonar el mercado de PC para 2020. Y, en caso de que opten por quedarse, necesitan decidir rápidamente qué cambios hacer o qué alternativas tienen que ofrecer para adaptarse.
Según los datos que maneja esta consultora, los cinco grandes nombres de PC portátiles han ganado un 11 por ciento de cuota de mercado en los últimos cinco años (pasando de acumular el 65 por ciento del mercado en 2011 a tener el 76 por ciento en la primera mitad de 2016), pero ha sido a costa de ingresos y rentabilidad. Gartner entiende que la base instalada de PC cada vez será menor y ello provocará, por tanto, una erosión de los ingresos y beneficios.
El precio no lo es todo
Tradicionalmente, muchos fabricantes de PC intentaban ganar cuota de mercado compitiendo en precio. Una estrategia que se lleva a cabo en infinidad de sectores e industrias. Aunque por cada venta pudieran sacar menos beneficio, contar con un alto volumen de unidades entregadas provocaba un aumento de los beneficios.
Sin embargo, esta estrategia ya no es válida, según la consultora, porque los usuarios están alargando la vida útil de los PC hasta el extremo y el precio y las especificaciones técnicas ya no son suficientes para que un usuario cambie de ordenador. Ofrecer una nueva experiencia de usuario puede ser una de las claves que acabe convenciendo al usuario, pero no la única.
Gartner considera que los fabricantes de PC pueden tener cuatro alternativas, resultado de la combinación de dos variables: producto tal cual lo conocemos ahora o innovador y modelo comercial actual o novedoso.
Cada una tiene sus ventajas y sus inconvenientes, sus riesgos y beneficios, por lo que cada fabricante debería sopesar las alternativas y decidir. Pero, según la consultora, todos ellos necesitan identificar sus competencias básicas, evaluar sus recursos internos y adoptar uno o más modelos alternativos de innovación de negocios y productos para permanecer o abandonar el negocio de PC.
¿Y si cambiamos el concepto?
Ante estos continuos vaticinios de la muerte de los PC, quizá el problema sea más bien de concepto. PC son las abreviaturas de Personal Computer u ordenador personal. Se empezó a utilizar esta denominación para distinguir estas máquinas (que podían ser manejadas por una única persona y que normalmente cabían en la mesa de un trabajador) de los grandes ordenadores o servidores, tipo mainframe.
Posteriormente, sin embargo, los PC se asociaban con un software: Windows. Si eras de Apple, tú no tenías un PC, tenías un Mac.
Pero lo cierto es que ahora seguramente tu smartphone sea más potente que un ordenador de apenas tres años. Incluso puede que cuando hables de PC no pienses en los Chromebooks o en Surface.
Las líneas que definen un PC y un móvil cada día están más difusas y ambos productos empiezan a asumir cualidades del otro. Los PC, incluso los portátiles, se están volviendo más portátiles, mientras que las tabletas son cada vez más potentes. Estamos empezando a ver PC en salones donde antes solo había consolas. Los ordenadores son, sobre todo, informática personal, y nada hay más personal que un smartphone o tableta.
¿Están acabados los PC? Quizá como nombre sí, quizá como concepto no. Quizá como diseño en formato torre y un monitor sí, quizá como herramienta básica de la informática actual no. El tiempo dirá.
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