Los jóvenes músicos Quevedo y Bizarrap han aventado la polémica en Twitter, una red siempre dispuesta a arder y más en verano.
publicado en El Pais sobre la colaboración musical de Quevedo y Bizarrap, que ha dado lugar a la canción del momento. ‘BZRP Music Sessions Vol. 52? (“Quédate”), que ocupa el número uno mundial de Spotify superando con creces los 300 millones de reproducciones.
La discusión comenzó al hilo de un extenso artículoEl resultado de la unión del joven intérprete canario Quevedo con el veinteañero productor y DJ argentino Bizarrap triplica el número de reproducciones de la otra canción del verano: “Despechá”, de Rosalía. Es normal, pues, la curiosidad suscitada por este dúo en los medios de comunicación.
Carlos Marcos, autor de este extenso artículo que trataba de entender las claves del fenómeno, recabó, entre otras, la opinión del crítico musical del periódico, Fernando Neira, y esa fue la chispa que incendió Twitter. Sobre la canción compuesta por Quevedo y Bizarrap, el experto comentó lo siguiente: “No hay un solo nanogramo de personalidad, de lenguaje propio, en la música. Y no digamos ya en la voz, ultraprocesada y cacofónica…La letra, si se puede considerar tal (y si se entiende, que no es sencillo), es un bochorno sonrojante…Definitivamente, nos estamos dejando manejar por la dictadura del algoritmo y por los espejismos de la viralidad…”.
Quevedo y bizarrap, «boomers» y «zetas»
Esas duras palabras provocaron una división de opiniones en Twitter que, en buena medida, se correspondía con la diferencia de edad de distintas generaciones que leyeron el texto, “boomers” y “Z”.
Unos destacaban la indudable eficacia de la canción de Quevedo y Bizarrap para alegrar cualquier fiesta en un tiempo necesitado de alegría para superar las distintas crisis a las que nos enfrentamos, y otros apoyaban el comentario del crítico musical afeando el uso de técnicas musicales como el “autotune”, por lo demás tan legítima como cualquier otra, para suplir las carencias vocales del cantante.
Sobre esto, hay que señalar que Quevedo y Bizarrap fueron víctimas de la difusión de un vídeo falso de una sesión de grabación de la canción en la que se podía escuchar la voz del canario sin la muleta tecnológica. El propio Bizarrap tuvo que salir al paso de este “fake” publicando un vídeo sobre la grabación real de la canción.
incomprensión intergeneracional
Esta polémica, por otra parte intrascendente, vuelve a poner de manifiesto la incomprensión cuando no el desprecio de una generación respecto a la anterior. Unos “boomers” que, al mismo tiempo que menospreciaban el trabajo de Quevedo y Bizarrap en Twitter, compartían con fruición un vídeo de Rick Asley cantando su archifamosa canción “Never gonna give you up” en su 35 aniversario. Extraordinario éxito que tampoco parece el colmo del refinamiento artístico, sea eso lo que sea.
Rick Astley volvió a grabar su icónico video ‘Never Gonna Give You Up’ para una compañía de seguros, 35 años después. Una joya. pic.twitter.com/viPBdfzjUX
— Retro 80s y 90s (@80s_y_90s) August 18, 2022
Más allá de los gustos de cada cual, todos ellos respetables, la discusión también ilustra la evolución, a menudo imprevista, de la percepción de la calidad de una obra artística. En el fragor de la discusión, algunos tuiteros compartieron una crítica musical, también publicada en El País sobre el grupo Queen y su cantante Freddy Mercury, hoy considerados clásicos.
En el texto, firmado en 1979 por José Manuel Costa, se puede leer: “Quien vaya a un concierto de Queen con ánimo artístico llega con un criterio estético equivocado. A esta gente o se les aprecia el descaro, el montaje obvio y la efectividad básica (incluidos los sonidos) o no se les aprecia nada”.
Sobre Freddy Mercury, Costa afirmaba: “es una especie de Jagger de segunda división. Su cara afilada, cuando se ve de perfil posee un cierto aspecto leporino, como de conejo chirriante. No canta ni muy bien ni muy mal, pero como el técnico de sonido que llevan, es un mago, resulta que incluso da el pego”.
Como vemos, palabras bastante similares a las que han merecido, en esta ocasión, Quevedo y Bizarrap.
«Quédate» cuando todo se va
El otro Quevedo, el poeta que compite con el músico por ocupar la primera posición en los resultados de búsqueda de Google, dijo que todos deseamos llegar a viejos y todos negamos que hemos llegado. Quizás la razón de muchas de los ataques vertidos contra el exitoso dúo sea la edad de los críticos y su resistencia a admitir que ellos saltaron y disfrutaron en conciertos ofrecidos en “playback”.
El tiempo dirá si “Quédate” pasa a engrosar la lista de canciones de éxito efímero que, con el paso de los años, quedan enterradas en el olvido o si, como sucedió con Queen, Quevedo y Bizarrap permanecen en la memoria de distintas generaciones.
La vida de todas ellas estará unida a canciones que retratarán, de una u otra forma, su momento histórico. Puede que “Quédate” sea lo que deseamos y necesitamos escuchar en un momento, como este, en el que todo parece irse.