En las últimas décadas, gracias al asentamiento de derechos sociales y a los principios de diversidad, hemos asistido a una verdadera revolución en cuestiones de relaciones amorosas y familia.
De hecho, en pleno 2024, podemos hablar de nuevos modelos de familia como, por ejemplo, las parejas LAT o lo que en español conocemos como “vivir juntos, pero separados”.
Si ya en la década de los 80, los estudios sociológicos avisaban del asentimiento de las llamadas parejas DINK o Double Income No Kids, para referirse a una moda naciente en Estados Unidos marcada por la unión de dos personas, pero sin llegar a tener hijos; ahora, tenemos que hablar de las Living Apart Together.
En este caso de dos personas que mantienen una relación estable, que incluso pueden llegar a firmar su matrimonio, pero que nunca vivirán bajo el mismo techo. Dicho de otro modo, cónyuges que defienden aquello de que un amor se enturbia en cuanto se comparte baño o uno de los dos descubre que el otro ronca.
Sin embargo, aunque se habla de modas o tendencias sociológicas alcanzadas gracias a la diversidad, la existencia tanto de las familias DINK como de las parejas LAT también tiene mucho que ver con los problemas a los que se enfrenta la sociedad actual.
Con un complicado acceso a la vivienda y trabajos no siempre estables, para las generaciones más recientes, como la Millennial o la Z, se les antoja complicado tener hijos o comprarse una casa, aunque sea entre dos.
Sin olvidar sus consecuencias, como una demanda excesiva de pisos de alquiler, que impulsa el precio hacia arriba; o un claro descenso de la natalidad en los países occidentales. Sin ir más lejos, en España, en menos de 50 años (de 1975 al 2021) el número medio de hijos que puede tener una mujer descendió desde el 2,7 al 1,1, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Explicamos esta profunda transformación en la manera de concebir las relaciones afectivas y familiares.
¿Qué es ser una pareja LAT?
Las relaciones Living Apart Together representan un modelo familiar que ha ido ganando popularidad en los últimos tiempos, pero… ¿Qué es ser una familia LAT?
Se usa este término o acrónimo para definir a las personas que mantienen una relación de pareja estable y comprometida, pero que optan por vivir en hogares separados. No hay espacio para terceros en este amor; simplemente, se acuerda no convivir.
Esta tendencia puede obedecer a diversas razones que pueden tener motivaciones personales, como lo es la necesidad de preservar la independencia; o ser consecuencia de la necesidad de tener unos horarios muy flexibles para conciliar con la carrera laboral.
Aunque también tiene mucho que ver las coyunturas económicas, la conciencia del autocuidado y la idea de disfrutar de menos tiempo en común, pero que sea de calidad.
Sea como fuere, las parejas Living Apart Together son percibidas, por algunos sectores conservadores, como un desafío a las normas sociales establecidas, que tradicionalmente asocian el amor con la cohabitación.
Las parejas LAT en España
Vivir en casas separadas como clave del éxito de una relación. Esta es la base del 8% de las parejas estables en España y que se definen como Living Apart Together.
A simple vista, puede parecer un porcentaje reducido, pero no lo es. Sobre todo, si lo comparamos con la extensión de esta tendencia amorosa en otros países como, por ejemplo, Estados Unidos o Inglaterra.
Allí, el número de parejas LAT supone en torno al 10% del total de la población que mantiene una relación.
Posibles ventajas del modelo amoroso de parejas LAT
Aunque en un primer momento este tipo de pareja pueda parecer que no tiene ventajas e, incluso, muchos las relacionan con cónyuges que están atravesando una crisis y necesitan espacio, ya hay estudios psicológicos y sociológicos que defienden lo contrario.
Estás con algunas ventajas desde el punto de vista de la psicología de las parejas LAT:
- Preservación de la independencia: Al vivir en hogares separados, cada miembro puede mantener sus propios espacios y rutinas, lo que favorece la autonomía y el desarrollo personal.
- Evita la rutina: No comparten sus vidas 24/7, lo que hace que la relación se mantenga fresca y emocionante, evitando la monotonía que a veces puede surgir al vivir bajo un mismo techo.
- Mayor flexibilidad: Las parejas LAT no suelen imponerse horarios, sino que organizan su tiempo y actividades con flexibilidad. Esto puede ser especialmente beneficioso para aquellos con horarios laborales irregulares o que necesitan viajar con frecuencia.
- Protección de los espacios personales: Al tener un hogar propio, cada miembro de la pareja puede diseñar su entorno a su gusto, sin tener que hacer concesiones.
- Fortalecimiento de la relación: Consideran que al tener menos tiempo para estar juntos, este es de calidad. No hay tiempo para tonterías, solo para la intensidad.
- Todo lo anterior, minimiza las discusiones, enfados y posibles problemas entre cónyuges.
Es importante destacar que las parejas LAT no son una solución universal para todos. Cada pareja es única y debe evaluar si este modelo de relación se ajusta a sus necesidades y expectativas.
¿Qué opinas tú sobre las parejas LAT?