La pandemia ha impulsado el proceso de transformación digital en España. Durante 2021, el número de usuarios de internet ha pasado del 72% del año anterior al 82%. Sin embargo, un 7% de españoles vive ajeno a la digitalización.
dificultades de aprendizaje a la hora de enfrentarse a las herramientas online.
Las razones de esta brecha digital son la edad avanzada, nivel bajo de ingresos y lasEstas son algunas de las conclusiones de la tercera edición del Observatorio sobre Usos Digitales creado en 2018 por Orange y OpinionWay que entrevistó a casi 17.000 personas de 13 países.
El estudio revela que el proceso de digitalización aumentó bruscamente en 2021. En primer lugar, el contexto global actual ha llevado a que muchas más empresas y servicios públicos incrementen su presencia on line, al mismo tiempo que la pandemia de Covid-19 también impulsó el teletrabajo, el aprendizaje a distancia y las interacciones digitales cotidianas (pagos sin contacto, comercio electrónico, entretenimiento en streaming, consultas médicas remotas, etc.)
Estas rápidas evoluciones han tenido una serie de impactos, no siempre positivos. Si bien muchas personas han disfrutado de más oportunidades y posibilidades, otras se han marginado aún más debido a la falta de acceso digital o conocimientos técnicos.
lazos sociales
Como era de esperar, tras la crisis sanitaria de 2020 y 2021 y los períodos de confinamiento, el mantenimiento de los lazos sociales ocupó el primer lugar en el Top 3 de beneficios de la tecnología digital con el 31% del total, seguido de la apertura al mundo (27%) y hacer la vida más fácil (26%). Sin embargo, destacan algunos detalles: solo en Europa, el ahorro de tiempo se colocó en tercer lugar (30%) en lugar de la apertura al mundo, que está mucho más rezagada en los rankings (19%), a diferencia de las otras zonas estudiadas.
Los principales beneficios, que pueden haber impulsado un aumento en los usos, también dan lugar a preocupaciones que a veces pueden actuar como obstáculos para el uso de las tecnologías digitales. De hecho, la protección de datos encabeza estas preocupaciones para todos los países encuestados: los temores de que los datos personales sean pirateados y la falta general de confianza en la tecnología digital van de la mano con los usos para los encuestados en casi todos los países. El segundo y tercer lugar están ocupados por respuestas muy diferentes según la zona geográfica: el riesgo de adicción y aislamiento social (24%) y el precio (21%) para Europa, la calidad de la red mediocre o poco confiable (23%) y los riesgos para la salud (21%) para el norte de África y la pérdida de tiempo en Corea del Sur (23%).
La encuesta también cubrió la percepción del impacto de la tecnología digital en el medio ambiente, con respuestas positivas que representan una mayoría significativa en todos los países (59% del total). Sin embargo, no se debe ignorar el porcentaje de respuestas negativas, especialmente en Europa (28%).
digitalización y protección del medioambiente
En el apartado social, el impacto positivo de la tecnología digital es igual de significativo. Los resultados muestran una forma de reconocimiento de este papel: los servicios digitales contribuyen al desarrollo de la solidaridad (66% de los encuestados), la economía local (73% de los encuestados) y la protección del medio ambiente (71% de los encuestados).
Cuando se trata de redes sociales, el 56% de los europeos y el 66% de las personas en el Medio Oriente están preocupados por el hackeo de sus cuentas.
El estudio muestra que cuando se trata de seguridad, la madurez y los usos juegan un papel importante en términos de ansiedades en torno a las tecnologías digitales: cuanto más maduros son los usuarios, menos preocupados están.