Hackeados. La realidad digital nos ha traído nuevos términos que ya forman parte de nuestro día a día. Para muchos, vivir en Internet es sinónimo de anonimato, de poder esconderse detrás de un nick y comentar o difundir información alegremente. Pero, para otros, se está convirtiendo en una tortura. Las noticias sobre celebridades hackeadas nos asaltan cada cierto tiempo. Revelar la intimidad de las personas populares es muy jugoso para quien se plantea el reto de descubrir sus contraseñas. A continuación, repasamos los casos más sonados. Seguro que a más de uno se os quitan las ganas de convertiros en VIP.
Celebgate, celebrities hackeadas
En 2014 saltaba la noticia. Las cuentas de correo electrónico e iCloud de numerosas personas (se calcula que más de cien) y de 18 celebrities habían sido hackeadas. Así, toda la red fue testigo de las fotos y vídeos íntimos de actrices y cantantes como Jennifer Lawrence, Kate Upton, Ariana Grande, Rihanna o Kirten Dunst (qué casualidad que sólo se hackeara a mujeres).
El pasado marzo, Ryan Collins fue detenido por este delito. Reconoció su culpabilidad y ahora está a la espera de un juicio por el que podrían condenarle a cinco años de cárcel. Sus actuaciones se dieron entre noviembre de 2012 y septiembre de 2014. El hackeo se produjo por un fallo de seguridad de iCloud, la nube de Apple. ¿Cómo? El hacker sustrajo el material íntimo con la aplicación Find My Phone y usando un archivo de órdenes script capacitado para desvelar contraseñas.
Ashley Madison, infieles al descubierto
Otro de los casos más sonados de cuentas hackeadas se dio el pasado verano, cuando el portal Ashley Madison, una web de citas para personas con pareja que quieren vivir una aventura extramatrimonial, vio cómo los datos de sus clientes se hacían públicos. ¿Afectó a muchas personas? Bueno, una minucia, apenas 32 millones de usuarios de una de las consideradas mejores webs para este tipo de affaires. Políticos, empresarios y famosos de toda índole se vieron implicados en este escándalo en el que, claro está, algunos nombres son más que llamativos: desde Tony Blair a miembros de los Departamentos de Seguridad Nacional y del Estado de Estados Unidos; e incluso se detectaron tres cuentas bajo el dominio Vatican.com. Eso sí, no se puede estar seguro de la fiabilidad de esos nombres, así que, siempre nos quedará la especulación.
En fin, casi 10 gigabytes de información sobre los usuarios de esta web, cuyo hackeo habría sido responsabilidad del grupo Impact Team y que se habrían publicado a través de navegadores encriptados como Tor y luego habrían circulado con archivos torrent. No sólo habría nombres de usuarios o mails, sino también información de las cuentas bancarias y las diferentes transacciones. Y todo esto, ¿por qué? Según Impact Team, se debe a las actuaciones de Avid Media Life (la empresa dueña de Ashley Madison) que obliga a los usuarios a pagar para poder borrar sus perfiles.
El hackeo a Sony Pictures y la verdadera cara de Hollywood
Ser una gran empresa tecnológica no va a impedir que tus cuentas puedan ser hackeadas. En 2014, la división cinematográfica de Sony, Sony Pictures, sufría un hackeo masivo cuyas repercusiones tienen aún, a día de hoy, importantes coletazos. Los secretos y el funcionamiento de una gran empresa dentro de una gran industria (todo es grande, sí) provocó la curiosidad de millones de personas de a pie. Salieron a la luz datos de todo tipo, desde información personal de trabajadores a los alias que usan actores o directores cuando quieren pasar desapercibidos al registrarse en un hotel. Pero, sin duda, lo más jugoso fueron los cotilleos, pues ésta es la palabra que lo define, que se conocieron respecto a la mala relación con estrellas como Angelina Jolie o Leonardo Di Caprio. Los emails personales de Amy Pascal, vicepresidenta de la compañía, han sido fuente de comentarios y más comentarios.
¿Y de dónde vino el ataque? Fuentes del FBI aseguraron que se trataba de una maniobra del gobierno de Corea del Norte, en concreto, del grupo GOP (Guardians of Peace) que perpetraron la acción como respuesta a la producción de la película ‘The Interview’, una cinta en clave de humor en la que dos periodistas estadounidenses son reclutados por la CIA para asesinar a Kim Jong-Un. El enfado de las autoridades coreanas habría tenido estas consecuencias, aunque desde el país asiático siempre se negó la autoría.
Ni Zuckerberg se libra
Para un hacker, seguramente sea todo un reto acceder a la información personal de uno de los hombres más poderosos del planeta (cibernéticamente hablando). Ése ha sido el caso del dueño de Facebook, Mark Zuckerberg, quién ha sido víctima de uno de los últimos hackeos VIP. El pasado 6 de junio se hacía pública la información de que el grupo OurMine Time había conseguido hackear varias de las cuentas en redes sociales de Zuckerberg a través del robo de contraseñas de LinkedIn que se produjo en 2012, del que se tuvo conocimiento este mismo año.
Y si os preguntáis cómo le pudo pasar esto a todo un gurú de las comunicaciones digitales, os sorprenderá saber que la causa sería uno de los fallos de seguridad más comunes entre los usuarios. ¿Os han dicho alguna vez eso de que para mantener a salvo vuestra privacidad no uséis la misma contraseña en webs diferentes? Pues justo eso es lo que habría estado haciendo Zuckerberg. Así que, al conseguir su contraseña en LinkedIn, se habría podido acceder a cuentas de otros sites.
No habla el músico, sino el hacker
WE had our Twitter account hacked. We can assure you that Jack is ALIVE and WELL and that this was a sick «prank».
— Tenacious D (@RealTenaciousD) 5 de junio de 2016
Una de las actividades derivadas de las cuentas hackeadas consiste en suplantar la identidad de quien se está hackeando y «hacerle decir» lo que el hacker quiera. Aunque no se sabe si hay relación o no, el mismo fin de semana que la contraseña de Zuckerberg fue descubierta, varios hackers entraron en las cuentas personales de Twitter de diferentes músicos y dejaron mensajes de dudoso gusto en su nombre. Algunos de los afectados fueron Keith Richards o Bon Iver.
Para los artistas no sólo fue problemático que sus cuentas fueran hackeadas, sino el tipo de mensajes que se difundieron. Por ejemplo, desde la cuenta del grupo Tame Impala se hacía una amenaza de bomba a la compañía Jet Blue; y desde la del grupo Tenacious D se anunciaba la muerte de uno de sus integrantes: Jack Black. A este «festival», podemos unir el hackeo a la cuenta de George Harrison, cuyo responsable, @j5zlol, escribió un mensaje para el músico en el que le conminaba a dejarle un MD para ayudarle a hacer más seguras sus cuentas. Sí, no sabía que el ex Beatlle, había fallecido…
Políticos, ¿hackeo o popularidad?
#NoBots Se está trabajando para averiguar quién está detrás de esta extraña campaña. Equipo Twitter MR
— Mariano Rajoy Brey (@marianorajoy) 5 de septiembre de 2014
Otro movimiento que se produce en redes sociales es el sospechoso aumento de seguidores que las cuentas oficiales de personajes populares pueden sufrir de golpe. Algo que es mucho más llamativo cuando se trata de políticos. El uso de bots está detrás de una actividad que redes como Twitter penalizan. Con motivo de la campaña electoral, algunas cuentas de los candidatos de los partidos que se presentaban a las elecciones sufrieron, en pocos días, un gran incremento de followers.
¿Cuál es la causa? Hay muchas teorías al respecto, algunos consideran que estas figuras fueron víctimas de un hacker, mientras que otros ven en estas acciones un deseo por conseguir más notoriedad. Desde algunas de esas cuentas oficiales, se apresuraron a anunciar que estudiarían cómo y quién había establecido el uso de estos bots. Como sabéis, existe todo un negocio respecto a la «captación» de seguidores y webs como Mercado de Fans o AddmeFast funcionan bajo esta premisa.
Los papeles de Panamá
Para despedir este repaso VIP a cuentas hackeadas, no podemos dejar de hablar de los famosísimos papeles de Panamá, que han sacudido a nombres de relumbrón en diferentes países. El objetivo de los hackers fue sacar a la luz los negocios de la empresa Mossack Fonseca, un bufete de abogados panameño especializado en sociedades en paraísos fiscales. ¿Las repercusiones? Muchísimos nombres populares, de todos los ámbitos del espectáculo, la cultura, el deporte… pero también de la política, con jefes de Estado y ministros incluidos.
Los hackers pudieron aprovechar un fallo de seguridad en las cuentas del bufete. Se habla de un plugin desactualizado desde hace más de dos años que permitió la entrada de los piratas informáticos. El uso de SSL v2, un protocolo de comunicaciones que estaría obsoleto y al que un hacker podría acceder con facilidad habría desencadenado la tragedia.
Imagen | Pixabay / iStock
En Nobbot | Hackers, los siete documentales que tienes que ver para conocer su mundo