Cada vez somos más conscientes de los datos que generamos en un solo día, cuando buscamos una dirección de un restaurante en Google Maps, qué tipo de consultas hacemos en internet, por qué lugares paseamos. También hemos entendido el valor que tienen dichos datos y, con ayuda, aprendemos a salvaguardar nuestra privacidad que gracias -entre otras cuestiones- a la regulación europea que está a punto de llegar, decidimos ceder voluntariamente a cambio del disfrute de herramientas y servicios.
En China, no solo han renunciado a la privacidad virtual, también han perdido su privacidad en la vida real a cambio de una mayor seguridad. Como en otras ocasiones, el país asiático vuelve a hacer gala de su capacidad tecnológica dotando a los policías que patrullan sus ciudades con unas gafas inteligentes con cámara y sistema de reconocimiento facial integrado.
gafas inteligentes para agentes de policía
Estas gafas escanean los rostros de todos los habitantes del país y facilita la labor de los agentes de policías, que pueden conocer en tiempo real los detalles de cada una de estas personas, tal como ha publicado Xataka.
Gracias a una base de datos almacenada en el smartphone que llevan los agentes, las gafas inteligentes identifican rápidamente, sin depender de conexión a internet. Según sus creadores, es capaz de identificar a una persona dentro de una base de datos de 10.000 sujetos en sólo una décima de segundo. Cada par cuenta con una cámara en el lado derecho.
Este nuevo proyecto nació con el objetivo de escanear los rostros de los pasajeros de tren, pero el éxito ha sido tal que han decidido utilizarlas fuera de las estaciones ferroviarias. De hecho, en una semana, la policía arrestó a siete sospechoso de secuestro y robo en la estación ferroviaria de Zhengzhou.
Las gafas inteligentes no solo identifican a las personas, también ofrecen información detallada con sus nombres, dirección, etnia, género, ocupación e incluso su historial de navegación en internet.