Cuando un smartphone deja de ser útil en el día a día no significa que se tenga que ir al cajón de los trastos o tengamos que tirarlo a la basura. Lo habitual es que llega un momento en que se vuelven demasiado lentos para las necesidades de los usuarios, falla la batería o no pueden realizar varias tareas a la vez. Esto no implica que no se les pueda dar un segundo uso como MP3 o reutilizar tu viejo smartphone como cámara de videovigilancia en el hogar.
Vamos a ver cómo le podemos sacar partido en este segundo caso, ya que las cámaras de los smartphones siguen funcionando bien, y tenemos un dispositivo que se conecta a nuestra red WiFi, que situado adecuadamente nos enfoca una habitación o una zona de la casa, que puede grabar imágenes y al que podemos conectarnos en cualquier momento para ver lo que ha grabado.
El smartphone como cámara de videovigilancia
Lo primero que tenemos que pensar es que el lugar donde coloquemos el smartphone, además de tener una buena ubicación para enfocar la zona que deseamos, deberá estar cerca de un enchufe. Por definición las cámaras de videovigilancia están conectadas las 24 horas, y si bien el smartphone tiene batería, será raro que uno viejo dure mucho tiempo.
Para que funcione adecuadamente lo ideal es utilizar una app que nos ofrezca la posibilidad de configurar como nosotros deseamos la cámara del smartphone. Por lo general instalamos una app de grabación en el smartphone que hará de videocámara y otra de control en nuestro teléfono. Vamos a ver algunas de ellas:
SECuRET SpyCam
Securet SpyCam es una de las mejores opciones que tenemos disponibles para Android. Tiene un coste de 5,02€ pero nos permite subir las capturas de imágenes y vídeos a Dropbox, utilizar el smartphone como una webcam junto con la app SECuRET LiveStream, pero como cámara de videovigilancia, la opción más interesante es la configuración con detección de movimiento, para que tome o capture imágenes justo cuando detecta presencia en la sala. Además nos envía un correo electrónico o un mensaje por Twitter avisando de dicha presencia.
IP Webcam, app gratuita para Android
Es una app muy útil tanto para utilizar en solitario, como para complemento de otras apps de videovigilancia, puesto que IP Webcam nos ofrece la posibilidad de ver en streaming las imágenes que está capturando nuestra cámara en ese momento, a través de VLC o del navegador web. El principal inconveniente es que sólo funciona si ambos dispositivos, tanto videocámara como smartphone de control están en la misma WiFi.
Cámara de seguridad Wi-Fi
Con Cámara de Seguridad WiFi tenemos otra opción similar que nos permite emparejar nuestro viejo smartphone para que haga de cámara de videovigilancia con nuestro teléfono habitual para que reciba las imágenes. También es posible acceder desde el navegador web, por lo que si se abren los puertos de forma adecuada en el router, podría llegar a visualizarse la imagen desde cualquier lugar con conexión a Internet.
Manithing, para Android o iOS
Manithing es una de las apps más completas ya que puedes configurar alertas de movimiento, seleccionar entre el modo de vídeo o de imágenes instantáneas, o utilizar IFTTT para configurar tu cámara de seguridad en maneras infinitas, ya sea para que nos envíe un SMS, encienda las luces de casa si tenemos bombillas inteligentes, etc. Además dispone de una opción para poder visualizar las imágenes a través de un navegador web desde cualquier lugar, por lo que es una de las más completas.
Dispone de diferentes planes de precios ofreciendo la posibilidad de almacenar las grabaciones en la nube, de forma que si sufrimos un robo y se dan cuenta que tenemos el smartphone como cámara, por mucho que se lo lleven o lo destruyan tenemos la grabación a salvo. Además podemos montar un sistema más completo con varios smartphones distribuidos por toda la casa.
Security Cam, también para iPhone
En este caso hablamos de Security Cam, una app para iOS que tiene un coste de 9,99€. Permite configurar la cámara para que haga fotos, grabe vídeo y sonido cuando detecta movimiento o ruido a través del micrófono. Además nos envía alertas al correo electrónico o puede subir fotos y vídeos a nuestra cuenta de Dropbox. Además nos puede dejar grabadas las fechas y las horas a las que fueron tomadas las imágenes para que no tengamos ninguna duda.
¿Qué le pedimos a una cámara de videovigilancia?
En muchas ocasiones el principal motivo de poner una cámara de videovigilancia es controlar en todo momento, cuando no estamos en nuestra casa o en la oficina, qué está pasando. Esta es una de las principales carencias que pueden mostrar este tipo de aplicaciones, aunque existen fórmulas para visualizar el streaming desde el exterior, en general suele ser más sencillo hacerlo con un dispositivo dedicado.
A la vez la visión nocturna o el ángulo de visión del smartphone no es tan bueno como podríamos tener en una cámara de videovigilancia. Algunas de las cosas como la activación con el movimiento, ya hemos visto que si existen apps que lo ofrecen. En todo caso parece una buena opción para ver partes de nuestra casa que tenemos alejadas, como la entrada del garaje o tener un cámara de vigilancia para ver que hacen los niños en su habitación en todo momento.
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Imagen | Peggy_Marco
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