A menudo, las redes sociales se convierten en vertederos digitales en los que grupos violentos o personas con pocos escrúpulos difunden mensajes de odio. Desde las mismas redes se plantean acciones para acabar con estos discursos, presionados por instituciones como la Unión Europea y, también, por el desgaste que esto supone en su reputación. El problema es grave y los gobiernos están preocupados. El francés, por ejemplo, está trabajando en un proyecto de ley para prohibir la presencia en una red social de personas culpables de declaraciones racistas y antisemitas, como se prohíben los hinchas violentos en los estadios. También los usuarios podemos ayudar a limpiar las redes sociales de indeseables utilizando las herramientas que estas ponen a nuestro alcance. Entre todo debemos contribuir a hacer un buen uso de la tecnología que tanto bueno nos ofrece.
mensajes de odio: trols, haters y flamers
Existen perfiles concretos de usuarios que disfrutan instigando a otros a través de la Red, como los trols (o usuarios molestos que bombardean con mensajes a otros grupos) o los llamados haters (o usuarios que promueven el odio en la Red a través de comentarios ofensivos o mensajes hirientes) o flamers (que se dirigen a una persona específica y como consecuencia de una discusión sobre un tema concreto).
Aunque los mensajes de odio en internet afectan a todos, son los niños y adolescentes el colectivo más vulnerable. Insultos en Whatsapp, publicación de fotografías o vídeos ofensivos en redes sociales, acoso y burla a través de distintos perfiles de Internet, aislamiento social… Una vejación pública y constante, sin posibilidad de escapar. Si esa persecución ya sería insoportable para un adulto, qué decir si la víctima es alguien con la falta de madurez de los más jóvenes.
denunciar, bloquear y reportar
¿Y qué podemos hacer como usuarios de las redes sociales para contribuir a atajar este problema? En primer lugar, y tal como explican en Internet Segura for Kids (IS4K), tenemos que ser conscientes de que difundir frases racistas, o que inciten al racismo, en internet constituye un delito de odio con consecuencias penales por lo que es clave denunciar estas situaciones ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El Código penal y el Estatuto jurídico de la víctima del delito protegen a las víctimas del “ciberodio” contra sus agresores y los jueces y tribunales están habilitados para destruir, borrar y retirar los contenidos de Internet.
En el caso de los jóvenes, Internet Segura for Kids (IS4K) ofrece una Línea de Ayuda (900 116 117) y también cuenta con una Línea de Reporte para hacer llegar cualquier contenido peligroso o perjudicial para los menores en Internet.
Precisamente en la web de del Centro de Seguridad en Internet para menores, nos detallan paso a paso cómo utilizar las propias herramientas de las redes sociales para reportar y bloquear los mensajes de odio.
1. FACEBOOK
2. INSTAGRAM
3. TWITTER
4. SNAPCHAT
5. YOUTUBE
