El científico francés Christophe Galfard, autor de los libros El universo en tu mano y Entender a Einstein. / Astrid di Crollalanza © Flammarion
El astrofísico y divulgador Christophe Galfard, autor del afamado libro El universo en tu mano, publica ahora una nueva obra dedicada a explicar la conocida ecuación formulada por Albert Einstein en 1905 E=mc2 que, junto a su creador, marcaron el devenir del siglo XX. En una entrevista concedida a Adeline Marcos, de la Agencia SINC, habla de su libro y explica, de forma sencilla, la trascendencia de Einstein y su trabajo a la hora de entender mejor cómo funciona el universo, la Tierra y nosotros mismos.
“E” simboliza la energía. La que hace que tu coche se mueva y las bombillas se enciendan; “m” representa la masa de la que están hechos el aire, el mar, las nubes y también tú y yo; “c2” es la velocidad de la luz al cuadrado, siempre es la misma y tú jamás serás tan rápido. Así resume los conceptos de la fórmula E=mc2, Christophe Galfard, autor de Para entender a Einstein, una emocionante aproximación a E=mc2 (Blackie Books, septiembre de 2017).
“E=mc2 -añade- demuestra que la energía puede convertirse en masa y la masa en energía y nos explica por qué podemos dividir el átomo y cómo brillan las estrellas. También nos dice que el espacio y el tiempo no son lo que parecen, ni nuestro planeta, ni nosotros. Por ello, esta fórmula de Einstein es una de las más importantes y bellas de la historia de la humanidad”.
Y es que con la fórmula E=mc2 el ser humano no solo comprendió cómo se crea energía a partir de la masa y viceversa, sino que no volvimos a ver el mundo de la misma manera. En su libro, de apenas 100 páginas, Galdarf aborda con un lenguaje sencillo la complejidad de una formulación que marca un antes y un después en la historia del conocimiento humano. Según explica este antiguo colaborador de Stephen Hawking, la fórmula de Einstein se convierte en una palabra y Para entender a Einstein, una emocionante aproximación a E=mc2 (Blackie Books, septiembre de 2017) es “como una entrada en el diccionario con ella”, confiesa.
A qué se parecería el mundo ahora si Einstein no hubiera existido?
Imaginando que desde entonces nadie hubiera llegado a sus conclusiones, viviríamos todavía en un mundo newtoniano. Es decir, un mundo en el que el espacio y el tiempo son tácitos. Los objetos no viajarían muy rápido, no podríamos tener teléfono móvil, ni ordenador portátil, ni siquiera ordenador a secas, ni satélites que comunican con la Tierra sin cometer errores. No tendríamos nada de esto. Nuestra vida sería totalmente diferente.
Conceptos como luz, energía, masa y tiempo son explicados en su libro de manera ágil e ingeniosa, con ejemplos de nuestra vida cotidiana. ¿Pero es realmente tan fácil comprender esta ecuación?
Entender en qué es importante y cómo ha cambiado de una cierta manera el siglo XX es muy sencillo. Y, si no se comprende, en cualquier caso es mi culpa [risas]. Pero entender exactamente lo que quiere decir es mucho más difícil porque va más allá de nuestra intuición. En el libro escribo que estamos acostumbrados a las leyes de la naturaleza tal como se presentan a nuestra escala y tamaño. Por ejemplo, sabemos que un objeto que lanzamos al aire caerá, no echará a volar. Y eso lo sabemos de manera intuitiva porque nuestros sentidos lo detectan. Pero en la naturaleza existen áreas que van más allá de nuestros sentidos. No percibimos todo, hay lugares y movimientos que nosotros nunca realizamos, y aquí es donde las leyes de la naturaleza son diferentes y difíciles de explicar.
¿Cree que algún día habrá algún descubrimiento tan revolucionario como los que realizó el científico alemán?
Estoy totalmente convencido de ello. Ahora, la pregunta es cuál será ese descubrimiento. Tendría que ser Einstein mismo para decírtelo. Pero en las ideas que los teóricos barajan en la actualidad para explicar los fenómenos incomprendidos hay tantos misterios, tantas cosas que aún no entendemos y que ni siquiera tienen sentido con las teorías que tenemos, que necesariamente hay una teoría subyacente que existe, que está en algún lado y que nadie ha encontrado todavía.
¿Qué podría explicar esta teoría?
Explicaría la materia y la energía oscuras, lo que pasó en el Big Bang, o lo que ocurre en el interior de los agujeros negros. Hay algunos científicos que introducen dimensiones suplementarias, universos paralelos y formas extrañas de materia. Sea cual sea la solución que se encuentre, se pondrán en cuestión algunos de nuestros conocimientos. Esto es lo que hizo Einstein.
Con su libro muestra que estamos preparados para entender a Einstein. ¿Cuáles han sido los aspectos teóricos más difíciles de tratar?
Realmente son los aspectos filosóficos los más complicados de explicar. La mayoría de las personas se imaginan que es demasiado difícil para ellos, y no estoy de acuerdo. Creo que la gente es mucho más inteligente de lo que piensa, pero no deben tener miedo y ponerse obstáculos. Nuestra intuición corresponde a los hallazgos de Newton, pero desde entonces hemos ido mucho más lejos con Einstein, Maxwell y otros, y así hemos descubierto otras realidades. Lo difícil es que el lector tome conciencia de que no es cuestión de comprenderlo todo, sino de aceptar que el mundo no es necesariamente el que creemos que es. Es como volver a tener una mirada de niño y descubrir algo sin proyectar lo que creemos.
La entrevista completa con Christophe Galfard, en Agencia SINC.