En China todo es a lo grande y no faltan ocasiones para confirmar esta afirmación. Lo último ha sido el uso de 1.500 drones para celebrar el aniversario del videojuego Princess Connect Re:Dive.
Había que celebrarlo por todo lo alto, pero todo lo alto en versión china. Por estos lares quizás nos hubiéramos conformado con una tarta o, en un derroche de recursos, una fiesta con disfraces y reparto de pegatinas. Sin embargo, China es mucha China, que diría Marco Polo.
Uno se imagina a los desarrolladores de Princess Connect Re:Dive debatiendo sobre cuántos drones poner a volar para que su espectáculo de luz y sonido quedara pintón. No es la primera vez que se organiza algo así: 1.200 drones utilizó Intel en su espectáculo de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018 y más de 3.200 iluminaron el cielo de Shanghai para promocionar una marca de coches de lujo.
Princess Connect Re:Dive cumple un añito
El caso es que, en decisión aristotélica, los organizadores de este nuevo evento con drones decidieron situarse en un discreto punto medio: 1.500 cacharros voladores les parecieron suficientes para sustituir a la tradicional velita sobre una tarta. Eso sí, su espectáculo guardaría una traca final para suplir con calidad lo que no se pudo lograr con cantidad: un código QR dibujado en el cielo.
Este fue el colofón de un espectáculo abracadabrante alrededor de Princess Connect Re:Dive que podéis ver en este vídeo:
¿Pero para qué un código QR?, se preguntarán los menos informados desde este lado del planeta situado a más de 200 millones de kilómetros del helicóptero de la NASA que sobrevuela Marte. Pues para que los asistentes al fasto pudieran descargarse información sobre Princess Connect Re:Dive y el propio videojuego en su móvil.
¿Que podrían haber conseguido eso mismo sin montar tanto lío? Seguro. ¿Que entonces no habríamos escrito estas líneas para hablar de ello? Segurísimo.