El día 15 de junio entra en vigor la nueva normativa que permite a todos los ciudadanos de la unión llamar y navegar con sus teléfonos móviles en cualquier país europeo sin costes adicionales a lo contratado en el suyo. Esta modificación, bautizada como el ‘fin del roaming’ conllevará un incremento considerable del tráfico de dato en las redes de las operadoras, en el caso de España principalmente en las zonas más turísticas. Para evitar cualquier incidente y ofrece un servicio de calidad, las telecos están aumentando las capacidades de sus infraestructuras de red.
Nuestro país es uno de los mayores receptores de turismo de la UE durante todo el año, sobre todo durante el verano. Por ello, las operadoras españolas han elaborado planes de refuerzo de sus infraestructuras. En 2017, todo parece indicar a que el número de turistas que elijan España como destino vacacional va a aumentar un 10% respecto al año anterior, cuando llegaron 75,3 millones de visitantes extranjeros, según ha publicado El Economista.
Además de la previsión del incremento del número de turistas, las operadoras tienen en cuenta que se espera que los turistas que el año pasado utilizaban datos puedan duplicar su uso y que muchos otros que hasta ahora no lo hacían, comiencen a hacerlo. Esto supone que, con respecto al mismo periodo vacacional del año pasado, el tráfico podría multiplicarse por cuatro (estimación agosto 2017 vs agosto 2016).
la adaptación al fin del roaming
Las principales compañías del sector consideran que las redes están preparadas para soportar el incremento de tráfico de datos previsto. No obstante, están trabajando en el refuerzo de las infraestructuras.
De forma análoga a lo que suele hacer en periodos vacacionales, pero teniendo además en cuenta esta circunstancia excepcional, Orange está desarrollando un proyecto para dimensionar su red, con el fin de dar respuesta a esta demanda adicional, especialmente en las zonas de mayor afluencia de turistas, para absorber estos incrementos de tráfico sin ver mermada la calidad de su servicio. Esto se está llevando a cabo ampliaciones de capacidad y dimensionando sus plataformas de tarificación , de servicios de seguridad de roaming, etc. que supondrán en conjunto un desembolso de unos 12,5 millones de euros.
Otra de las cuestiones en las que han estado trabajando las operadoras de telefonía móvil es en la adaptación de su oferta comercial a las nuevas condiciones de mercado que generará el fin de los cargos por roaming. Las compañías de telecomunicaciones están informado a los clientes de los cambios, aunque algunas ya ofrecen este servicio gratuito desde hace tiempo.
Por ejemplo, Orange ya se adelantó el pasado año a la entrada de la nueva legislación europea al incluir el consumo de voz y datos en la UE dentro de las tarifas Love Familia de Orange y ha continuado este año aplicando la misma medida en el resto del catálogo Love, así como en las nuevas tarifas móviles Go y en las recién estrenadas tarifas de prepago.
Fuente: El Economista
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