Hace algunos meses ya os hablamos de algunas de las prácticas que han logrado renovar el mercado del retail, así como de la metamorfosis que ha experimentado el turismo durante los últimos años gracias al avance tecnológico. Unos cambios que tampoco han pasado desapercibidos en otros ámbitos, como el que la Fundación Orange aborda en su último informe, realizado en colaboración con la Agencia Evoca y que lleva por título La transformación digital de los sectores del transporte y la logística.
¿Cómo les ha afectado la aparición de unos vehículos cada vez más inteligentes? ¿A qué barreras han tenido que enfrentarse para llegar a este punto? ¿Cuáles son las claves de esta mutación? Hoy arrojamos algo de luz sobre estas cuestiones y repasamos las iniciativas y casos de éxito que mejor las ejemplifican. Unas consideraciones que estructuramos en torno a cuatro ejes fundamentales: Cloud, Mobile, Internet de las Cosas y Social.
Cloud: los coches están en la calzada y, ahora, también las nube
Cuando hablamos de Cloud, nos estamos refiriendo a aquellos productos y servicios digitales en torno al cloud computing y el big data que han permitido a las empresas subirse al carro de la innovación, reduciendo costes y ofreciéndoles una visión del conjunto global pero también muy detallada.
Transporte
Si nos centramos en el transporte y en el análisis masivo de datos, este tipo de soluciones nos brindan la oportunidad, por ejemplo, de reducir la congestión de las ciudades, mejorar el tráfico, y ofrecer a los interesados datos en tiempo real. Y no solo eso, sino que a un nivel más avanzado, es posible aplicar algoritmos a toda esta información recabada con el fin de llevar a cabo predicciones para, incluso, redirigir el tránsito tanto de personas como coches sin intervención humana alguna.
Algo que puede llevarse a cabo a través de los semáforos –como hacen en Los Ángeles- y que acaba favoreciendo al usuario. Que éste, a su vez, ofrezca continuamente datos sobre su experiencia, permite una personalización muy interesante.
En Boston hacen algo parecido con las imágenes de las cámaras ubicadas en las calles, que combinan con los datos de Waze y de los vehículos Uber para reducir atascos. También tienen analíticas específicas para los aparcamientos en doble fila. En España, Ferrovial está desarrollando un proyecto para identificar y predecir patrones de tráfico en autopistas y vías alternativas con la información de redes sociales, llamadas telefónicas y demás. Y Parclick utiliza un sistema parecido para encontrarnos aparcamiento.
Logística y distribución
En el ámbito de la logística y la distribución, los beneficios tienen que ver con la gestión de las empresas de los datos internos y del cliente, al que también conocen mejor –y al que tratan de adecuarse–. Estos primeros, por ejemplo, pueden referirse al stock. Unas herramientas multiplataforma que agilizan todo el proceso y lo hacen más eficaz (desde la petición del producto hasta su entrega). En este punto cabe referirse a las aplicaciones del blockchain a los puertos para agilizar las transacciones.
Unos sistemas por lo que está apostando Iberia, cuya transformación digital trata de mejorar la experiencia del cliente y de potenciar una relación multiplataforma con ellos, sobre todo a través de los canales móviles. Su idea es que vayan siempre acompañados, pero también la de facilitarles la vida y adaptarse a sus hábitos. Etihad Airways cuenta con un programa similar para favorecer la interacción y crear una buena y duradera primera impresión.
Packlink y Correos son las que mejor ilustran lo que está ocurriendo con la distribución. Dos empresas muy diferentes, pues si bien lasegunda cuenta con más de 300 años de existencia, la primera nació ya online en 2012. Con el tiempo se ha convertido en un metabuscador de servicios de paquetería que se integra con los sistemas informáticos de más de veinte transportistas, que ofrece más de 300 servicios de transporte, y que no deja de implementar nuevas soluciones para facilitar el proceso de envío.
Las eCorreos (apps), las oficinas Tu Tienda Correos (en las que los formularios se rellenan con tablets), y el uso de drones en la legendaria y citada institución son otras evidencias.
Mobile: el móvil como ayudante del conductor
Los citados sectores también se ha visto muy influidos por el incremento del uso del smartphone. El pago a través de ellos, el nacimiento
de apps que permiten planificar las rutas, el uso de la geolocalización para ubicarse, conocer dónde se encuentra el paquete, y el empleo de códigos QR para consultar los tiempos de llegada de los mismos son algunas de las tecnologías cuyo impacto ha sido más que significativo. Por no hablar de la demanda de WiFi –al servicio del entretenimiento– en los medios de transporte y de las soluciones móviles integradas en los propios vehículos que favorecen la seguridad. Pero vayamos por partes.
Transporte
Transports Metropolitans de Barcelona es una de las que decidió apostar por la transformación en plena crisis, un proceso que llevó a cabo centrándose en la comunicación con el usuario a través, entre otros, de redes sociales y aplicaciones móviles. Sí, porque tienen varias que permiten planificar los viajes, saber por dónde moverse, conocer el estado de la red de transporte sin salir de casa y más.
La Empresa Municipal de Transportes de Málaga, asimismo, ha puesto en marcha un sistema de videovigilancia y telemetría para aumentar la seguridad en los autobuses y recabar datos sobre los vehículos respectivamente. Esto último le permite ahorrar combustible y prevenir las averías.
Cabify y Taxi Class también han sabido aprovechar el filón de la tecnología. La primera es una compañía que alquila vehículos con conductor y que ofrece tarifas cerradas, mientras que la segunda es un servicio de taxis, digamos, de lujo, desde el punto de vista geek. Sus vehículos tienen un equipamiento a la última. Vehway, por su parte, es una app de mensajería instantánea made in Spain que permiteconectarse con otros usuarios que circulan por la misma carretera con el número de móvil y de matrícula.
En el apartado del entretenimiento a bordo destacan Immfly y Gogo. La primera es una empresa barcelonesa que tiene socios como Atresmedia, la BBC, Unidad Editorial y otros medios, y ha empezado a utilizarse en los aviones de Iberia Express y Volotea para la visualización de contenidos en el móvil, la tableta y otros dispositivos. Gogo ofrece algo muy similar en Estados Unidos con American Airlines, Air Canadá, Aeroméxico y otras.
Por supuesto, proyectos como el del metro de nueva York que renovará sus instalaciones para incluir conexiones WiFi, puertos USB, pantallas y demás, influirán positivamente en este ámbito.
Logística y distribución
Redur, por su parte, es una entidad de logística y distribución especializada en el transporte urgente e internacional que tiene su propio servicio dedicado al sector farmacéutico, que garantiza la conservación de los medicamentos entre 15 y 25 grados. Este permite el seguimiento de la temperatura en tiempo real durante todo el proceso, desde la recogida hasta la entrega.
Internet of Things: TOdito conectado, incluso lo que no piensas
El Internet de las Cosas es otro de los vértices de la transformación de estos sectores, pues permite crear desde estaciones, aeropuertos, puertos y autopistas inteligentes, hasta otros servicios centrados en el pago mediante wearables en los medios de transporte, cruceros y similares.
Su empleo en los vehículos, asimismo, es clave para conocer datos sobre los mismos y la conducción, e incluso para prevenir accidentes, interactuar con los semáforos y el entorno en general. Tal es así, que el próximo paso se encuentra en la implantación del coche autónomo, capaz de funcionar él solo con este contexto. El empleo de drones y máquinas conectadas en la distribución y producción de mercancías se han convertido en herramientas fundamentales.
Transporte
El Metro de Madrid, por ejemplo, se encuentra desarrollando un proyecto de estación inteligente a través de la cual podrán controlarse las instalaciones, la información de los pasajeros, su conectividad, y que permitirá mejorar los procesos internos, adelantándose a averías y detectando incidencias tan cotidianas como la de que una máquina se quede sin cambio.
Aena también cuenta con una utilidad que permiten al viajero recibir notificaciones y conocer los datos sobre su vuelo al entrar al aeropuerto. Además, la información que le ofrece se adapta al lugar donde se encuentra (en el embarque, la terminal, etcétera). Las empresas Exterion Media y Proxama, de publicidad, hacen algo parecido cuando los usuarios se suben a los autobuses de Londres que tienen sus anuncios. Mercedes Benz, asimismo, ha decidido ir un poco más allá y ha presentado uno (un bus) autónomo que ya está probando en Ámsterdam. Y hay otros como Ford que se centran en las infraestructuras y en planes de movilidad inteligente. Por desgracia, no podemos abordar aquí todos los casos.
Logística y distribución
En el ámbito de la logística y la distribución Seur está cambiando también las tornas. Lo está haciendo de la mano de servicios como Seur Predict, que ayuda a ordenar la ruta de los repartidores e informa al cliente del momento en el que recibirán el pedido, One Click (basado en el IoT y que permite llamar al mensajero pulsando un botón) y su servicio de logística inversa, para las devoluciones. Sus acuerdos con CaixaBank y Amazon son también clave.
Precisamente esta última está experimentando con los drones para entregar productos adquiridos mediante comercio electrónico; algo que depende en gran medida de la legislación de cada país pero que en Estados Unidos ya está implementando. DHL es otra de las pioneras en utilizarlos para enviar medicamentos y otros productos que se necesitan con cierta urgencia en Alemania. La entidad está empezando a usar robots para recoger los pedidos y que se encargan del trabajo físico y el empaquetado.
Redes sociales y economía colaborativa
Para acabar, las compañías de transporte y logística son conscientes de las ventajas que les ofrecen las redes sociales, tanto para darse a conocer como para interactuar con sus clientes y ofrecerles información. Una manera de fidelizar usuarios, atender sus reclamaciones, etcétera. Cuando hablamos de economía colaborativa, por otra parte, nos estamos refiriendo a la aparición de nuevas modalidades relacionadas con estos negocios.
Transporte
Así, se ha cambiado el concepto de coche en propiedad por otros modelos basados en compartirlo cuando se necesita o en alquilarlo cuando no se emplea uno que sí se ha comprado. Los casos de Blablacar, Social Car –centrada en el alquiler de coches entre particulares- y Bluemove –lo hace por horas– lo ejemplifican a la perfección.
Wazypark, un tanto distinta, lo que ha hecho es crear una comunidad que lo que hace es comunicarse para proporcionar información sobre las plazas de aparcamiento que han dejado (u ocupado).
Logística y distribución
La distribución de mercancías no se queda atrás, sino que GOI –una plataforma que conecta particulares y transportistas profesionales con aquellos que necesitan hacer los envíos–; y Shipper –funciona de forma muy parecida– vuelven a evidenciar este cambio.
Dicho lo cual y analizado el panorama, no es oro todo lo que reluce, pues la transformación de estos sectores también se está enfrentando a algunas dificultades como la resistencia al cambio, la mezcla entre lo público y lo privado, el desconocimiento de las ventajas de la digitalización, la falta de visión estratégica, la escasez de talento, las incertidumbres legislativas y otros inconvenientes.
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